Juan Carlos Galindo Vácha, gerente delegado para las elecciones cafeteras, en entrevista con Portafolio, hizo algunas precisiones acerca de esta jornada.
¿Hasta dónde podría escalar un cafetero en esta organización?
Podría hacerlo hasta la más alta jerarquía: el Comité Nacional de Cafeteros, desde que cumpla con las condiciones para ser delegado del Comité Departamental y tenga su cédula cafetera vigente y tres años de antigüedad, puede hacerlo.
¿Qué son las elecciones cafeteras?
Son un proceso totalmente democrático, en la medida en que la Federación es un entre privado, con esencia democrática desde su configuración, y por eso busca que los propios asociados puedan votar y ser electos.
¿Alguna condición particular?
Para esto se requiere tener liderazgo, buscar los votos de sus amigos y conocidos y, obviamente, contar con la voluntad popular que los elija.
Para los comités municipales solo se necesita la cédula cafetera y no es necesario tener antigüedad.
¿Desde cuándo se inició este proceso democrático?
Las elecciones cafeteras van ya por su sexto evento, es decir, que llevan unos 25 años de haberse iniciado este proceso electoral. Es interesante, en la medida en que las bases tienen la posibilidad de expresarse y depositar su voto y elegir a sus líderes.
¿Cómo es el proceso electoral?
Es un proceso mediante el cual los cafeteros cedulados pueden votar por los diferentes candidatos para los comités departamentales y municipales, por lo que cada cafetero tiene la posibilidad de depositar dos votos (para municipal y departamental).
¿Qué se elegirá?
Los miembros de los 370 comités municipales y los 15 comités departamentales; a su vez, se eligen los delegados al Congreso Cafetero.
Para esta jornada están habilitados los cafeteros que tengan su cédula cafetera vigente al corte del 21 de junio, fecha en que se cerró el censo electoral que tiene hoy 374.215 personas habilitadas; dependiendo de los votos que se obtengan, se elegirán a quienes logren mayor votación.
¿Hay diferencias entre las votaciones para departamentos y municipios?
Sí. Para el caso de los departamentos, estos se dividen en seis circunscripciones homogéneas (netamente cafeteras), buscando que cada una pueda tener su representación.
Así se evita que los grandes municipios logren los seis escaños (principales) a los que tiene derecho cada departamento.
Así, cada una de las circunscripciones logra un representante y se eligen por medio de planchas inscritas, con principales y suplentes, y se vota por estas.
¿Y los comités municipales?
Por cada comité se inscriben listas de seis caficultores principales y seis suplentes.
Cada lista está conformada por 12 personas y los resultados se logran por medio del sistema llamado de cuociente electoral y mayores residuos.
Solo se tienen en cuenta los votos válidos y en blanco; los nulos y los no marcados no cuentan.
¿Qué tantas posibilidades hay de que se renueve la dirigencia cafetera?
Para esas elecciones hubo aumento significativo de inscripción de candidatos, este fue de 11 por ciento (1.300 más), con respecto a las elecciones pasadas. Se inscribieron 15.870 candidatos, repartidos en 195 planchas para comités departamentales y 1.290 listas para los municipales.
¿Se tienen los perfiles de los candidatos?
Sí. Se está validando a cada uno de estos, pero esa información aún está en proceso.
En las inscripciones, cada uno consignó sus datos básicos, pero tendremos los perfiles de cada uno.
¿Este modelo ha sido ‘exportado’?
Sí, es un modelo para ‘exportar’, pero esto no se ha hecho. En Colombia no hay una organización que tenga unas elecciones como estas. Estaremos en 566 municipios, más del 51 por ciento del país; se elegirán 4.620 dirigentes de 15.870 inscritos y se instalarán 2.314 mesas en todo el país.
Una iniciativa de cualquier cultivador ¿hasta dónde puede llegar?
A los comités, municipal, departamental, nacional o, incluso, a la gerencia del gremio, donde podría ponerse en marcha.
¿Quién vigila este proceso?
El Comité directivo dispuso que, para dar tranquilidad, hay instancias adicionales como una Comisión asesora, conformada por personas de reconocimiento nacional del más alto nivel de consultoría.
También, hay un externo que coordina el proceso (el gerente encargado del censo).
En tercer lugar, habrá observadores electorales, que coordinarán con la llamada Misión de Observación Electoral (MOE).
Esta hará observaciones sobre la apertura de votaciones, puestos de votación, cierre y conteo de votos, entre otros aspectos.
¿Habrá observadores internacionales?
No. Es muy costoso.
ESTO ES EL CUOCIENTE ELECTORAL
Según el Artículo 263 de la Constitución Política, el cuociente será el número que resulte de dividir el total de los votos válidos por el de puestos por proveer.
La adjudicación de puestos a cada lista se hará en el número de veces que el cuociente quepa en el respectivo número de votos válidos.
Si quedaren puestos por proveer se adjudicarán a los mayores residuos, en orden descendente.
Así, se asegurar la representación proporcional de los postulados.