La madrugada de ayer (miércoles) no fue igual para los habitantes del centro de Buenaventura. Y todo por cuenta de un poderoso artefacto explosivo que hacia las 9:00 a.m. fue detonado a pocos metros de la Alcaldía de la ciudad.
Siete personas murieron y otras 42 resultaron heridas por la acción del estallido. De los heridos, cuatro de ellos se encuentran en estado de gravedad, según las primeras versiones del secretario de gobierno de Buenaventura, Henry Moreno. Las autoridades regionales señalaron que la explosión no sólo afectó a la Alcaldía sino a buena parte de las instalaciones de la Fiscalía regional, y a una importante área comercial.
Todo indica que los responsables del atentado fueron miembros del frente urbano 'Manuel Cepeda' de las Farc. Sin embargo, el fiscal general, Guillermo Mendoza, señaló que se manejan otras dos hipótesis que apuntan por un lado a la banda paramilitar de 'los rastrojos', que se habría vengado del reciente decomiso de un cargamento de cocaína, y por otro a las vendettas entre narcotraficantes.
"Por el lugar en el que se puso la bomba queda la impresión de que se trató de una retaliación contra la Policía y contra la Fiscalía, pero nosotros no podemos asegurar nada en concreto", dijo Mendoza. Por su lado, el comandante de las Fuerzas Militares, general Freddy Padilla, calificó el ataque de "terrorista" y lo vinculó con las Farc.
El explosivo fue activado al paso de un vehículo policial y por eso un uniformado murió y varios resultaron heridos. Las primeras investigaciones permitieron determinar que se trató de un carro de los años ochenta que tenía unos 40 kilos de explosivos en su interior y fue estacionado en las inmediaciones de la sede de la Fiscalía y a unos 20 metros de la Alcaldía.
El defensor del pueblo, Vólmar Pérez, recordó que desde hacía varias semanas había alertado sobre los riesgos de hechos violentos en esa ciudad por la presencia de miembros de grupos ilegales.
Además de las Farc, en Buenaventura operan bandas de autodefensas dedicadas al narcotráfico y que utilizan el puerto para el envío de drogas hacia México y Estados Unidos. El pasado lunes, las Farc incineraron siete camiones de transporte de carga en la vía que comunica al centro del país con Buenaventura, principal puerto del país sobre el Pacífico, lo que obligó a cerrar la carretera por varias horas.