La "tasa de refinanciación", que determina el nivel de crédito para los particulares y las empresas, queda así en su nivel de octubre de 2006. Se trata de la segunda reducción en un mes, tras la acción conjunta adoptada por los grandes bancos centrales el 8 de octubre.
El gesto del BCE era ampliamente esperado para estimular una economía en problemas, y en momentos en que la inflación cae rápidamente a raíz del retroceso de los precios de las materias primas.
Un poco antes, el Banco de Inglaterra anunció un recorte de sus tipos de interés de 1,5 puntos porcentuales, a 3%, una reducción mucho mayor a la esperada.
El Banco Nacional Suizo (central) también anunció el jueves un recorte de su tasa de referencia, la tasa Líbor a tres meses, en medio punto porcentual, a entre 1,5% y 2,5%.
El 8 de octubre, el BCE ya había recortado sus tipos en medio punto porcentual en una acción coordinada inédita junto a la Reserva Federal estadounidense (Fed) y otros cinco bancos centrales para estimular a los debilitados mercados financieros.
Desde entonces, la Fed ha reducido sus tasas a un mínimo histórico a 1%.
El BCE también recortó el jueves las dos tasas que enmarcan el principal tipo de interés: la tasa de depósito (a la cual los bancos pueden colocar dinero durante 24 horas en el BCE) fue reducida a 2,75%, y la tasa marginal de créditos (a la cual los bancos pueden pedir dinero prestado por 24 horas al BCE) cayó a 3,75%.
La inflación, la principal inquietud del BCE, aún está elevada, en 3,2%, pero está cayendo rápidamente hacia el objetivo de la institución -poco menos de 2%-, ya que la crisis financiera mundial genera una fuerte desaceleración económica que ha socavado la demanda. "La inflación puede caer por debajo de 2,5% para fin de año", pronosticó Ceric Thillier, economista de Natixis.
La Comisión Europea advirtió esta semana que la peor crisis financiera desde la Gran Depresión ha empujado a la zona euro a su primera recesión -dos trimestres consecutivos de contracción económica- desde que se creó el bloque en 1999.
Los pedidos industriales en Alemania se hundieron un 8% enseptiembre en relación a agosto, informó el jueves el ministerio de Economía, en la primera confirmación de que la mayor economía europea ha sido duramente golpeada por la desaceleración mundial.
Esta fue la mayor caída desde la reunificación de Alemania en octubre de 1990.
Los funcionarios del BCE son claramente conscientes de las variadas amenazas que se ciernen sobre la economía.
El economista jefe del BCE, Juergen Stark, advirtió el miércoles de las "dramáticas consecuencias" de la crisis financiera internacional, en comentarios al diario Financial Times Deutschland. "No podemos comparar la situación actual con las recesiones pasadas, esta vez es más serio", dijo Stark.
"Los problemas del sector bancario tienen consecuencias dramáticas que tendremos que confrontar durante años", añadió.
La mayoría de los analistas ahora consideran que la principal tasa de crédito caerá a 2% o 2,5% a mediados de 2009.