"Reclamamos del porqué y hacían sino reírse", comentaron quienes denunciaron esa situación.
Así mismo, dijeron que "en días pasados también unos soldados con fotos en mano, estaban buscando a hombres y mujeres de la región. Aparecían camuflados y creemos que se trata de un montaje".
De las denuncias conoció el alcalde de Tuluá, Rafael E. Palau; la procuradora Departamental, Martha Chávez Gardeazábal; el personero de Tuluá; abogados de la Defensoría del Pueblo y oficiales de la Policía de Tuluá y del Batallón Palacé.
El sábado se realizó entre autoridades civiles y armadas y campesinos, una reunión de urgencia para advertir de los hechos.
Los campesinos aseguraron que "los soldados se quedaron ocho reses una finca y cuando los propietarios han ido a reclamar al Batallón Palacé, solo les reconocieron el valor de tres".
"Con el miedo que les tenemos a las armas nosotros ante grupos armados. Yo no puedo negar que llegan guerrilleros, pero igual si lo hacen los soldados o los "paras", nosotros estamos a la merced de todos ellos", dicen.
Se advirtió un desplazamiento masivo de campesinos a los municipios de Buga, San Pedro, Andalucía, Bugalagrande y Tuluá. "Si nosotros hemos sido resistentes a salir de nuestras parcelas es porque queremos que nos dejen producir", dijo uno de los labriegos.
Aseguraron que "los hijos de Rigoberto Hoyos: Oscar William, Nestor Carlos y Olga Patricia, fueron capturados por el ejército y sindicados por los soldados de ser integrantes de las Farc, cuando todo el mundo sabe que son campesinos".
Oficiales del Batallón Palacé que recibieron la denuncia se comunicaron con sus superiores e informaron que hasta el momento no se conocía oficialmente que era lo que había ocurrido.
TULUÁ