En medio de un entorno internacional adverso por cuenta de la caída de los precios del crudo, el presidente de la Repúblcia, Juan Manuel Santos, en su primera alocución del año manifestó que una de las metas del Gobierno es que el país entero esté en obra durante el 2015.
“Vamos a seguir construyendo autopistas, carreteras, mejorando aeropuertos y puertos, recuperando el Magdalena, y edificando viviendas”, manifestó el jefe de Estado al tiempo que hizo un llamado para incentivar la producción de los diferentes sectores de la economía.
Uno de los retos que deberá afrontar el Estado, explicó Santos, es la reducción de los ingresos derivados de los hidrocarburos. Esto, reiteró, llevará al Gobierno a apretarse el cinturón. “Gracias al manejo prudente que venimos dando a nuestras finanzas, esperamos que no haya grandes sobresaltos”.
Agregó que una de las metas es continuar impulsando el crecimiento económico para mantener al país dentro de las economías con mejor desempeño en Latinoamérica. Santos recordó que en los últimos cuatro años se han creado 3 millones de puestos de trabajo y que de la pobreza salieron cerca de 3,6 millones de personas.
“Este 2015 será también el año del campo”, manifestó el mandatario, quien reiteró que este renglón de la economía contará con un presupuesto histórico de $5,1 billones de pesos al año, los cuales se destinarán a mejorar el acceso a la tierra y a otorgar recursos para cultivarla.
Otra tareas pendientes, explicó el presidente, son la puesta en marcha de los proyectos que presentaron los departamentos y municipios bajo el Pacto Nacional por el Agro y la implementación de las recomendaciones que hizo la Misión Rural –liderada por el exministro José Antonio Ocampo– para comenzar a transformar el agro.
Frente a los diálogos de paz entre el Gobierno y la guerrilla de las Farc, Santos manifestó que el 2015 “puede ser el año en que termine el conflicto armado que hemos sufrido por más de medio siglo”.
Recordó que en las conversaciones en La Habana (Cuba) se están discutiendo los últimos dos puntos: derechos de las víctimas y fin del conflicto. “Comenzamos a trabajar en acuerdos sobre la forma en la que se hará la dejación de las armas y la reintegración a la vida civil”.