La cantidad de viviendas nuevas comercializadas en el país aumentó 4,5 por ciento el año pasado frente al 2013, advierte un informe de La Galería Inmobiliaria en el que también destaca, tras una encuesta a 1.504 personas, que 82 por ciento compraría el inmueble para habitarlo.
“Solo 2 por ciento lo haría para revenderlo y 16 por ciento, para obtener una renta a través del alquiler”, agrega el documento.
“Que la gente adquiera una vivienda para residir en ella es muy importante porque se deja atrás la práctica especulativa que hizo carrera hace unos años”, explica Manuel Alfonso Carrillo, gerente de la firma de servicios inmobiliarios Avacol.
El directivo también le suma otra razón: “Ahora los puntos de equilibrio son más largos, es decir, ya no estamos en la época en que se compraba y se vendía muy rápido y a precios altos”.
La Galería Inmobiliaria también resalta que 30 por ciento de los inversionistas tiene menos de 30 años, 15 por ciento está entre 41 y 50 años, y 14 por ciento supera los 50. Por su parte, la mayor participación, 41 por ciento, la tiene el grupo conformado por personas entre 31 a 40 años.
Para el presidente de Avacol, esta es una tendencia muy natural ya que en promedio la gente termina sus estudios a los 25 o, máximo, a los 30 años. “De hecho, lo que hemos visto es que el estrato 3 –cada vez más fuerte– se volvió un estrato universitario con alta capacidad de compra”.
Jorge Enrique Gómez, presidente de la Lonja de Propiedad Raíz de Bogotá, asocia esta tendencia al poder adquisitivo de la clase media que, según el directivo, aumentó 50 por ciento en el país.
“Esto le permite comprar un inmueble de mayor costo, comparado con un valor relativo de hace diez años”, anota.
NUEVA VERSUS USADA
El informe también destaca que 38 por ciento de quienes compraron vivienda nueva contempló en algún momento del proceso adquirir la usada. Las razones: la posibilidad de acceder a más área (según el 55 por ciento encuestado) y un precio más cómodo (31 por ciento).
Sin embargo, las facilidades de pago revirtieron esa tendencia, según La Galería Inmobiliaria; incluso, la firma de investigación le agrega el precio como un componente clave a la hora de optar por el negocio.
Aunque parecería un dato sorprendente, porque la gente siempre se ha quejado de los altísimos costos de la finca raíz, vale aclarar que las respuestas son de personas que ya compraron y tuvieron la oportunidad de comparar con la oferta de segunda mano.
En este punto, a pesar de que la brecha entre los precios de una y otra aún existe, también es cierto que se ha reducido.
Se suma, incluso, la ventaja de acceder a la venta sobre planos que a los interesados les da la alternativa de pagar la cuota inicial durante el tiempo que se desarrolla la obra. Si tienen los recursos, es un buen negocio con proyecciones de valorización al momento de la entrega.
Alejandro Castañeda, presidente de la firma constructora ACCI, asegura que las facilidades a la hora de adquirir un inmueble residencial están marcando una nueva dinámica; a esto le suma las facilidades de pago que destaca La Galería Inmobiliaria y, para complementar esto, las tasas de interés que se han mantenido estables.
De estar en 16,3 por ciento en el 2009 se pasó a un promedio, actualmente, de 11,9 por ciento.
MÁS INVERSIÓN CON SUBSIDIO
A propósito de la compra de vivienda, ayer el ministro Luis Felipe Henao anunció que, durante el primer trimestre de este año, 7.899 hogares colombianos adquirieron una Vivienda de Interés Prioritario (VIP) o social (VIS) con el subsidio a la tasa de interés hipotecario.
“Con esta iniciativa, el Gobierno asume hasta 5 puntos porcentuales de la tasa de los créditos, que les representa un ahorro que oscila entre 30 y 40 por ciento de la cuota mensual”, dijo el funcionario, quien agregó que para el 2015 se dispusieron 29.500 cupos, de los cuales quedan disponibles 21.601 (2.539 para VIP y 19.062 para la adquisición de VIS).
BAJÓ EL PAGO DE CONTADO Y CRECIÓ EL ENDEUDAMIENTO
Según La Galería Inmobiliaria, la gente que compra de contado bajó de 24 por ciento en el 2012 y 19 por ciento en el 2010, a 12 por ciento este año. Además, al comparar el proceso de compra frente al estudio del 2013, un mayor porcentaje de las familias adquirió una casa o un apartamento en un sitio mejor al esperado y con mayor valor al que tenía calculado. “Esto, a costa de sacrificar área y un mayor nivel de endeudamiento”, concluye.
Gabriel E. Flórez G.
Economía y Negocios
