La nueva Latitude 2100 forma parte de una categoría nueva de computadoras muy similares a las portátiles, pero más baratas, livianas y menos potentes.
A diferencia de otros modelos de Dell, la carcaza de la 2100 no es de plástico resbaladizo sino de caucho, fácil de sostener y de colores brillantes.
La ausencia de aperturas en la tapa inferior significa que dejarla caer sobre un charco de leche derramada no le hará daño y una luz en la tapa indicará al docente si el alumno está conectado a Internet.
Aún se analiza en qué medida los laptops aumentan el desempeño académico, pero el presidente de Dell, Michael Dell, asegura que su presencia en el aula es crucial para mejorar la enseñanza.
"No cabe duda de que la tecnología puede cumplir un papel para mejorar el rendimiento de los estudiantes", dijo Dell.
La 2100, destinada a estudiantes desde preescolar hasta el octavo grado de educación básica, tiene una pantalla de 25 centímetros y un teclado levemente más grande que el de las portátiles comunes.
Se puede configurar con una pantalla al tacto, que según Dell es útil para las manos pequeñas de los menores y un teclado antimicrobiano porque esas manos frecuentemente están sucias. Se puede agregar una cámara digital.
Cuestión de precios
A diferencia del aún mítico 'portátil de 100 dólares' a la cual aspira la organización Una Portátil Por Niño, la nueva opción de Dell cuesta 369 dólares, que pueden llegar a 500 si se agregan los programas más solicitados.