La Dian informó que se confiscó un total de 7.200 botellas que pretendían distribuirse en locales comerciales del sector conocido como Sanandresito de Bogotá y desde ahí hacia el resto del país.
La aprehensión, que asciende a 360 millones de pesos, es la más grande ofensiva que la Policía Fiscal y Aduanera y la Dian han realizado.
Los gobernadores del país han alertado sobre el efecto negativo que tiene en las finanzas regionales el contrabando de licores, el que estiman que reduce a las regiones las rentas que se destinan para temas como salud, educación y recreación, al menos en un billón de pesos.
REDACCIÓN ECONOMÍA Y NEGOCIOS