Analistas consultados por Reuters esperaban que el dato del PIB, que mide el total de bienes y servicios producidos dentro de las fronteras del país, creciera a una tasa del 5,9 por ciento en el periodo octubre-diciembre. El PIB se expandió a una tasa del 2,2 por ciento en el tercer trimestre.
El departamento agregó que las ganancias corporativas después de impuestos crecieron un 6,5 por ciento en el cuarto trimestre, menos que el 12,7 por ciento de incremento en el periodo anterior y por debajo de las expectativas del mercado que aguardaba un alza del 10 por ciento.
En todo el 2009, las ganancias después de impuestos disminuyeron un 6,9 por ciento, la peor caída desde el 2000.
Esto hace a los inventarios 'más magros, lo que implica que podrían crearse condiciones para más pedidos y rellenar (los inventarios). Ya lo estamos viendo en el primer trimestre', dijo Richard DeKaser, presidente de Woodley Park Research en Washington. 'Espero una modesta revisión al alza (en las previsiones) de crecimiento del primer trimestre', agregó.
Los futuros accionarios estadounidenses mantuvieron las ganancias tras el dato, mientras que los bonos permanecieron estables.
El crecimiento del PIB fue menor al previsto debido al impacto de la inversión empresarial, el gasto en consumo y una revisión a la baja de los inventarios.
Gran parte de la recuperación económica tras la peor recesión desde los años 1930, ha sido conducida por los estímulos estatales y porque las empresas están siendo menos agresivas en reducir inventarios.
Esto ha elevado las preocupaciones de que el crecimiento pueda encontrar baches a fines de este año, cuando el impulso de estas dos fuentes desaparezca, dado el tímido gasto en consumo y el alto desempleo.
Cuando las empresas incrementan los inventarios o desaceleran el ritmo de su liquidación, las firmas manufactureras elevan la producción y esto impulsa al PIB. Si se excluyen los inventarios, la economía se expandió a una tasa del 1,7 por ciento, frente al 1,9 por ciento estimado el mes pasado.
Los inventarios empresariales cayeron 19.700 millones de dólares en el cuarto trimestre, levemente más que los 16.900 millones estimados en febrero. En el periodo julio-septiembre, se redujeron en 139.200 millones de dólares.
La variación en los inventarios sumó 3,79 puntos porcentuales al PIB en el último trimestre del 2009. Esta fue su mayor contribución desde el cuarto trimestre de 1987.
En todo el 2009, la economía se contrajo un 2,4 por ciento, la peor cifra desde 1946, dijo el departamento.
También hubo pequeñas revisiones a la baja en inversión empresarial y gasto en consumo, que contribuyeron a la rebaja de las estimaciones del PIB. La inversión de las empresas creció un 5,3 por ciento, en vez del 6,5 por ciento estimado en febrero. Esta cifra refleja el menor gasto en construcción.
El sector inmobiliario comercial está en problemas por su alta tasa de vacantes y difícil acceso al crédito.
El gasto en la construcción de viviendas nuevas fue revisado a la baja a un 3,8 por ciento de incremento en el trimestre final del 2009, frente al 5 por ciento reportado el mes anterior. En el tercer trimestre, se había expandido un 18,9 por ciento.
Sin embargo, las ventas de casas nuevas se están enfriando este año, al alcanzar un mínimo histórico en febrero.
El alza del gasto en consumo fue ajustado a un 1,6 por ciento, desde un 1,7 por ciento, lo que está por abajo del 2,8 por ciento del tercer trimestre, cuando el consumo recibió un empuje por el programa de recambio de vehículos 'dinero por chatarra'.
El gasto en consumo contribuyó con 1,16 puntos porcentuales al PIB del cuarto trimestre.