La protesta de los transportadores fluviales en Buenaventura tiene a Guapi, municipio costero del Cauca, a oscuras, y a otras 14 poblaciones del Litoral Pacífico en dificultades.
El alcalde (e) de Guapi, Dimas Orejuela, dijo que necesitaban con urgencia el diésel que les llega desde el Puerto para generar energía para sus 32.000 habitantes.
“El fin de semana la empresa encargada del suministro de energía nos reportó que tendríamos luz solo por tres noches, durante seis 6 horas.
El martes se nos agotó y eso, obviamente genera una crisis muy profunda porque pone en condiciones de vulnerabilidad y de inseguridad a los habitantes de la cabecera municipal y a la Fuerza Pública”, alertó el funcionario.
La semana pasada se vieron obligados a un racionamiento. El servicio eléctrico solo se prestó durante seis horas diarias, pero el plan de contingencia se les agotó.
La salida que tiene la Administración local es lograr que los barcos de la Infantería de Marina les puedan traer el combustible.
Desde el pasado 5 de mayo se encuentran almacenados y bloqueados en Buenaventura cerca de 30.000 galones de diésel, necesarios para 15 días de suministro eléctrico en el municipio de Guapi.
“Nosotros hacemos un llamado para que nos colaboren y avanzar en un acuerdo que permita que llegue el combustible y superemos esta crisis.
Que haya una negociación porque es muy preocupante la crisis en materia de energía. Además, ante la falta de transporte se genera la escasez y el encarecimiento de los productos”, dijo el Alcalde (e).
Una libra de papa que se compraba en 400 pesos, se comercializa ahora en 2.000.
Los transportadores fluviales asociados en Buenaventura argumentan que el Gobierno no ha atendido las peticiones que han planteado desde comienzos del año.
Piden aumento en los subsidios al combustible diésel y disminuir las exigencias de equipos de navegación como chips y dispositivos satelitales.
El subsidio actual del combustible es del 23 por ciento y los transportadores aspiran a que llegue al 50 por ciento.
Los transportadores de cabotaje, como también son conocidos, solicitan además, poder a acceder a créditos blandos con el Banco Agrario y que sus barcos sirvan como garantía.
Un barco de transporte de carga y pasajeros tiene un valor aproximado de 500 millones de pesos y un viaje desde Buenaventura a cualquier destino de la Costa Pacífica les cuesta alrededor de 10 millones de pesos, de los cuales, según los navegantes, no recuperan un porcentaje considerable.