Este miércoles, al filo del mediodía, el Gobierno retiró de la Comisión Quinta de Cámara de Representantes el proyecto de ley 133 del 2014, que creaba las llamadas zonas de interés de desarrollo rural y económico (Zidres).
Según la iniciativa presentada, radicada el 3 de octubre pasado en la Cámara de Representantes, las Zidres se establecerían en territorios de aptitud agropecuaria, que demandan elevados costos de adaptación productiva, tienen baja densidad poblacional, carecen de infraestructura mínima y resultan inapropiadas para desarrollar unidades de producción familiar.
“Con estas se busca promover la inclusión social del trabajador agrario, aumentar la productividad de la tierra; además, impulsar el desarrollo social y económico de la zona, mejorar las condiciones del suelo, incentivar la conservación del medioambiente y fomentar el acceso y la regularización de la propiedad de la tierra”, indicaba el proyecto.
También, buscaba la promoción del empleo rural y la seguridad alimentaria de los campesinos.
Pese a estos argumentos y muchos más que traía en su exposición de motivos, no tuvo buen ambiente desde el mismo momento de su radicación.
Vale la pena recordar que la iniciativa fue redactada por el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, y no por el de Agricultura, pues el titular de esa cartera se declaró impedido. En su momento, en 2013, el entonces ministro, Rubén Darío Lizarralde radicó un proyecto de ley sobre tierras, que fue retirado al otro día por el Ejecutivo.
En las cuentas de los legisladores es la quinta vez que el Gobierno intenta legislar sobre los temas de tierras.
“El proyecto hacía parte de la reiterada estrategia de los últimos gobiernos para eliminar las disposiciones de la Ley 160 de 1994, que establecen que los baldíos deben ser entregados a campesinos y posterior a su adjudicación, no pueden ser acumulados en grandes extensiones”, dijo a Portafolio el senador Alberto Castilla.
Ahora, otro de los temores que se tienen frente a este ya frustrado proyecto lo manifestó el exministro de Estado juan Camilo Restrepo, durante un foro sobre el Plan Nacional de Desarrollo; en el evento, el estadista advirtió que el proyecto, así como otras iniciativas frustradas en el Congreso, está incluido en dicho Plan.
Esa estrategia la consideró como preocupante, en la medida que podría convertirse en ‘moda’ de los futuros gobiernos que, al no tener el respaldo para sus iniciativas de ley, las incluiría en sus planes de desarrollo.
Por su parte, la vicepresidenta de la Comisión Quinta de la Cámara, Nery Oros, indicó que el retiro del proyecto de ley fue una decisión sensata de parte del Gobierno, pues este proyecto deberá compilar las necesidades de todos los productores (grandes medianos y pequeños) lo mismo que de las comunidades de las zonas de influencia de las posibles Zidres.
“Como estaba redactado, el proyecto no atiende las necesidades de los campesinos, pues los obligaba a endeudarse para comprar sus tierras, por ejemplo; sin embargo, no puede desconocerse la importancia que cobran los empresarios para el desarrollo rural productivo”, dijo Oros, representante por el Vichada.
En los corrillos de la Cámara se comentó que el Gobierno redactaría un nuevo proyecto esta vez, cuyo articulado sería el resultado de un consenso con todas las partes que deban involucrarse; sin embargo, no se fijó una fecha para su presentación ante el Congreso.