Así lo explicó la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), que advirtió sobre la 'presión alimentaria' que generará el éxodo de desplazados desde la capital al interior, cifrado en unas 256.000 personas por la Organización Internacional para las Migraciones.
La FAO dispuso ya la importación de 500 toneladas de semillas de fríjoles y 200 toneladas de maíz para relanzar la agricultura, que representa el 25 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) haitiano.
La FAO destacó que esta organización apoya el plan del gobierno haitiano, que cifra en unos 500 millones de dólares el presupuesto necesario para la recuperación de la agricultura y estimó que serán necesarios unos 25 millones para comenzar las acciones. "Son necesarias intervenciones muy rápidas para proveer semillas y que la gente pueda producir hasta que se restablezca el circuito comercial", anotó la FAO.
Las zonas próximas al epicentro del terremoto sufrieron daños en los canales de riego, en muchos tramos obstruidos por escombros, lo que dificulta la llegada del agua al campo. En esta área, donde se registran daños en el 80 por ciento del hábitat rural, la FAO trabaja en una intervención rápida para conseguir que el agua llegue a los cultivos de maíz y habichuelas, entre otros, y salvar las cosechas que se recogerán entre febrero y marzo.
La FAO ha solicitado 10.000 equipos de herramientas para su distribución entre los agricultores, aunque también existen problemas para conseguirlos con rapidez por la falta de existencias en República Dominicana. También se estudia la implantación de un programa de agricultura urbana que, basado en el cultivo de hortalizas en cajas, permitiría a las personas afectadas alimentarse y, a la vez, les serviría como terapia, señaló la FAO.