La institución, que revisó a la baja sus perspectivas de crecimiento anunciadas con anterioridad, atribuyó sus futuras pérdidas al precio del crudo y a la reducción de la demanda de billetes.
La asociación ha hecho sus cálculos basándose en un precio medio del barril de petróleo de 113 dólares, es decir, 40 dólares por barril más que en 2007.
Este aumento ha causado que el petróleo represente un 36 por ciento de los costes operacionales totales, cuando en 2002 era sólo del 13 por ciento.
De hecho, según las expectativas de la IATA, el coste del petróleo será este año para la industria aérea de 186.000 millones de dólares.
Con respecto al 2009, la asociación indica que la reestructuración de la industria puede producir "algunos beneficios, pero que las débiles perspectivas económicas causarán una reducción del tráfico".
La caída de la demanda de billetes en julio también causó una revisión de sus perspectivas del aumento del tráfico de pasajeros para este año, que ahora está cifrado en un crecimiento del 3,2 por ciento.