Para cada uno de los casos se estableció un contingente anual que fija un determinado número de toneladas que podrán ser importadas, explicó el ministro de Comercio, Industria y Turismo, Sergio Díaz-Granados, aquien agregó que con esta medida lo pactado en el Acuerdo de Tunja se convierte en realidad.
Para la compra externa de cebolla, procedente de la CAN y el Mercosur, se fijó un contigente anual de 102.392 toneladas, mientras que para el fríjol será de 23.323 toneladas, de 1.644 en el caso de la leche, de 4.698 cuando se trate de importación de lactosuero, de 2.178 toneladas de tomate, de 1.073 de arveja, de 3.202 de papa fresca, de 969 de pera y de 8 toneladas anuales de queso fresco, explicó el Ministerio.
Díaz-Granados también señaló que la reactivación del comecio con Venezuela, sobre todo en la venta de productos alimenticios, va por buen camino. “Estamos a la espera de tener un mecanismo claro y expedito de pago, para que se puedan aumentar las exportaciones hacia el mercado venezolano”, señaló el alto funcionario.
El Ministro confirmó, además, otras medidas para ejercer un mayor control a las importaciones de lactosueros y fertilizantes. El Gobierno anunció que suspendió el contingente de 3.000 toneladas anuales de lactosueros, con un arancel del 20 por ciento, proveniente de terceros países. Además, con la expedición del decreto 1989, del 12 de septiembre de 2013, se eliminan, por 2 años, los aranceles de los fertilizantes y plaguicidas.