Al finalizar el primer trimestre, 31.359 micros, pequeñas y medianas (mipymes) se habían registrado en la Dian para beneficiarse de la reducción temporal de los aportes parafiscales.
La mayoría de ellas (97,1 por ciento) son medianas empresas, lo que, a juicio de expertos oficiales, podría estar indicando la existencia de problemas que desestimulan o impiden que los micros y los pequeños negocios traten de obtener esas gabelas tributarias.
No todas las mipymes inscritas para disminuir el pago de los parafiscales tienen derecho al descuento establecido legalmente, pues algunas no cumplen ciertos requisitos, principalmente aquel que tiene que ver con haber sido creadas después del primero de mayo del 2006.
La Ley 590 del 2000 estableció descuentos del 25, 50 y 75 por ciento en el pago de los aportes parafiscales (al Sena, cajas de compensación e ICBF) a cargo de las mypimes con el fin de estimular su creación y, de paso, la generación de puestos de trabajo.
El descuento del 75 por ciento cubre a las empresas en su primer año de operación; el del 50 por ciento, al segundo año y el del 25, al tercer año de funcionamiento. A partir del cuarto pagarán la totalidad de los aportes (9 por ciento sobre el valor de la nómina).
La idea, además, es estimular la formalización empresarial mediante esos descuentos, ya que diferentes estudiosos del tema aseguran que las cargas parafiscales no sólo no fomentan el nacimiento de empresas y empleo sino que llevan a que muchas mipymes se creen en la informalidad.
Lo cierto es que apenas 169 microempresas se han inscrito en la Dian buscando ese beneficio; las otras 730 son pequeñas unidades empresariales. De acuerdo con información del Ministerio de la Protección Social, 7.216 mypimes (23,8 por ciento del total de registradas en la Dian) funcionan en Bogotá, reflejo de la concentración de la actividad económica en la ciudad.