“Las propuestas para reformar el actual sistema tributario global son claramente insuficientes y las instituciones que promueven la cooperación internacional en el ámbito tributario no son lo suficientemente incluyentes”.
Esa es la conclusión de la Comisión Independiente por la Reforma de la Fiscalidad Corporativa Internacional, que hoy revelará un documento que incluye recomendaciones globales sobre el tema, y en la que participa el exministro de Hacienda colombiano José Antonio Ocampo.
En la declaración final, los expertos aseguran que no solo “hay tácticas abusivas en el ámbito tributario por parte de las multinacionales, sino que esto aumenta la presión tributaria sobre el resto de los contribuyentes, vulnera las obligaciones cívicas de las corporaciones, roba a países desarrollados y en desarrollo recursos críticos para luchar contra la pobreza y para financiar los servicios públicos, exacerba la desigualdad de ingresos y aumenta la dependencia de los países en desarrollo de la asistencia oficial”.
UNA FORMA DE CORRUPCIÓN
De la misma manera, la declaración señala que las prácticas tributarias abusivas constituyen una forma de corrupción. “Esto es cierto incluso cuando las prácticas de las corporaciones se atienen a la legalidad y cuando utilizan su influencia política para lograr que se introduzcan leyes tributarias que les dan margen para cometer dichos abusos”.
También piden que las multinacionales tributen como una sola entidad que hace negocios a escala internacional. “Esta es la clave de toda reforma en este campo, porque las multinacionales suelen estructurar los precios de transferencia y otros acuerdos financieros para trasladar los beneficios que generan a empresas pantalla radicadas en las jurisdicciones con baja tributación”.
Así mismo, hacen referencia a los paraísos fiscales, a los que acusan de facilitar maniobras tributarias abusivas que generan enormes perjuicios para la comunidad mundial.
ACCESO A INFORMACIÓN
En la declaración de principios, el grupo de expertos reclama mayor transparencia y acceso a la información de las empresas globales, al tiempo que recomiendan ampliar el debate sobre la elusión tributaria de las multinacionales y hacerlo más accesible al público.
Además de la tributación única y de la transparencia, la Comisión Independiente por la Reforma de la Fiscalidad Corporativa Internacional recomienda frenar la competencia tributaria, asegurar el cumplimiento de las normas, reformar los convenios sobre tributos y desarrollar un sistema de cooperación impositiva internacional más incluyente.
Respecto a la declaración tributaria única, la Comisión les pide a los Estados “rechazar el artificio de que las filiales y sucursales de las multinacionales son entidades independientes con derecho a un trato tributario aparte. Igualmente, proponen establecer modelos de acuerdos que faciliten la participación de distintas jurisdicciones a la hora de distribuir los ingresos y costos atribuibles a una multinacional que opera en dichas jurisdicciones.
“En lugar de permitir que se atribuyan los ingresos derivados del control o la titularidad de los derechos de propiedad intelectual a una jurisdicción de tributación baja, dichos ingresos deberían atribuirse a las jurisdicciones donde se desarrolló la propiedad intelectual o, si se vendiera, se debería repartir de acuerdo con factores económicos objetivos, como las ventas y el empleo”.
El informe dice que la cooperación externa debe ir más allá de la actual iniciativa BEPS de la Ocde.
ES CLAVE PONERLES FIN A LAS GABELAS IMPOSITIVAS
La Comisión sostiene que los Estados deberían examinar los efectos colaterales de las ventajas tributarias que conceden a las multinacionales y eliminar las que propicien la evasión tributaria a otro país. “Todos los países deberían hacer públicos los incentivos, las ventajas tributarias y las exclusiones de ingresos que ofrecen a las empresas globales”.
El informe dice que es necesario “emprender acciones legales adicionales ante la Comisión Europea para clarificar los factores que califican a ciertas ventajas tributarias otorgadas a las empresas como ayudas estatales ilegales y frenar el uso de ventajas tributarias”.
La Comisión recomienda imponer sanciones penales a las prácticas abusivas y desarrollar un modelo de retención impositiva, que obligue a la retención en la fuente de los impuestos sobre los pagos de intereses, dividendos, cánones y otros pagos entre compañías filiales de empresas globales, antes de que dichos pagos crucen las fronteras.