En un entorno marcado por un Producto Interno Bruto de 7,9 por ciento, es decir, 1,5 puntos por encima del promedio de la economía nacional, el sector edificador no frena el ritmo y, por el contrario, se proyecta con más fuerza.
Así lo advierte Sandra Forero, presidenta de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), quien habló con Portafolio, entre otros temas, de la necesidad de mantener el subsidio a la tasa de interés.
Tras la reelección del presidente Santos se asegura la continuidad de varios programas para el sector constructor, ¿qué prevé para el futuro inmediato?
Los efectos del nuevo programa de las 86.000 viviendas para ahorradores seguirán siendo fundamentales, particularmente en términos de la oferta de vivienda social.
Esto, sumado al inicio de obra de muchos proyectos comercializados durante el 2013, nos da un buen panorama.
¿De qué dependerá que el mercado mantenga el ritmo?
Desde el punto de vista de la demanda, esperamos trascender con los programas actuales a una política integral de Estado, es decir, de largo plazo.
Ojalá el subsidio a la tasa de interés se mantenga y se apoye la compra con montos que garanticen el cierre financiero y su redistribución regional. Igualmente, son importantes los mecanismos de reducción de riesgo crediticio para la población informal.
¿Y por el lado de la oferta?
Atando esta con el desarrollo urbano esperamos que se dé una trasformación radical en la gestión del suelo y que se habilite bajo criterios de ubicación, escala y oportunidad, con actuaciones urbanas integrales que dinamicen su gestión para promocionar proyectos en todos los estratos.
El subsidio a la tasa fue tema de análisis en el reciente congreso gremial.
Si no se destinan recursos, ¿qué vías sugiere para no frenar la dinámica, teniendo en cuenta que ya se agotaron?
Sin poder ofrecerlos, no solo en el sector financiero sino en las mismas salas de venta, los proyectos se afectan comercialmente.
En este punto insistimos en la necesidad de que el Gobierno haga el esfuerzo fiscal y asigne recursos para la continuidad de la medida.
Un reciente informe de Anif dice que el beneficio hace que los precios de la vivienda aumenten y que la banca debería comprometerse vía tasas, ¿qué opina?
Las presiones sobre los precios deben evitarse impulsando la oferta y no restringiendo los mecanismos que fortalecen la demanda.
Al margen de la existencia del subsidio, si no se logra reponer la oferta a la misma velocidad que se comercializan los proyectos, se seguirán impactando los precios.
La banca hipotecaria actúa en una estructura de mercado competitiva y hay múltiples originadores de crédito, eso hace que la tasa solo esté determinada por elementos del mercado y fundamentos macroeconómicos.
El Gobierno Santos prometió otras 300 mil viviendas gratis, un modelo exitoso en otras regiones pero pobre en Bogotá.
Sin suelo y problemas jurídicos, ¿de nuevo pasará en blanco?
Esperamos que no sea así. Creemos que lo ocurrido en los últimos años, perdiendo la oportunidad con el programa de las 100.000 viviendas, deja lecciones sobre la necesidad de avanzar en la disminución del déficit y en generar condiciones para promover nuevos proyectos.
En Bogotá, hay algunos ejemplos muy positivos en el programa de vivienda para ahorradores. Esperamos que con el nuevo ciclo del de gratuidad, la ciudad se beneficie más.
Se acerca el segundo semestre del año, ¿cuáles son las cifras más recientes –y representativas– del sector? ¿Cuáles son las proyecciones?
Las ventas de vivienda nueva mantienen su dinamismo.
Hasta abril del 2014 se reportaba un crecimiento anual de 8,5 por ciento con variaciones de 7,9 y 8,8 por ciento para la Vivienda de Interés Social (VIS) y aquella diferente a esta, respectivamente.
De la misma forma, se mantiene un buen desempeño en lanzamiento de nuevos proyectos al mercado, con un crecimiento anual de 12,2 por ciento a abril pasado impulsado por el alza en la reposición de la VIS, que registró una variación anual de 40,7 por ciento.
¿Y en otros usos?
En los destinos no residenciales, el área que inició construcción en el último año creció 7,6 por ciento, con 4,5 millones de metros cuadrados, según cifras del Dane al primer trimestre del 2014.
En ese sentido, nos mantenemos en una proyección de 8,4 por ciento del PIB del sector edificador para este año.
Igualmente, esperamos que con las disposiciones que se adopten sobre el subsidio a la tasa, podamos seguir en la senda positiva.
Específicamente en vivienda, ¿cuál es la meta de ventas este año?
Esperamos un crecimiento de 7 por ciento en las ventas al cierre del 2014, con cerca de 160.000 unidades.
SIGUE EL SUBSIDIO A LA TASA PARA VIS
Al terminar la reciente junta del Banco de la República, el Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, reiteró que se mantendrá el subsidio a la tasa hipotecaria para la vivienda social y anunció que el beneficio para la oferta nueva, con precios entre 80 y 200 millones de pesos, se evaluará esta semana. Así se atiende el llamado que hizo la presidenta de Camacol en el congreso del gremio. En la reunión también participarán la banca y Minvivienda.
Gabriel E. Flórez G.
Economía y Negocios