La terminación de contrato por parte del ingenio María Luisa de dos cooperativas que prestaban sus servicios y cuyos asociados buscan una nivelación salarial dejó cesantes a 183 corteros de caña y paralizó las labores en el ingenio. La situación se relaciona con los asociados de Cooprogreso y La Fortaleza, que buscan un reajuste en el precio que se les paga por tonelada de caña cortada. Floro Bolívar, representante de Cooprogreso, refirió que desde el 2008, cuando los ingenios acordaron con los corteros de caña un precio de 6.400 pesos tonelada, para los del María Luisa el precio fue de 6.100. Expuso que este año los demás corteros ajustaron de nuevo la tarifa, mientras para los 183 vinculados con las dos cooperativas siguen los valores de 2.008. Desde hace 28 días hay conversaciones para un reajuste, sin ningún acuerdo. El pasado 15 de abril fuimos notificados de la suspensión de los contratos, explicó. Según se conoció, ante la situación, los corteros vinculados a las cooperativas se mantienen a la entrada del ingenio, y aun cuando permiten el ingreso de personal, no dejan pasar materia prima, llevando a la parálisis de las labores. La situación afecta otros 334 trabajadores directos. EL TIEMPO intentó comunicarse con las directivas del ingenio María Luisa, con resultados infructuosos. ANDRUI
Finanzas
20 abr 2010 - 5:00 a. m.
Parálisis en ingenio María Luisa
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