"Los mayores costos de producción del cultivo del algodón se relacionan con el control de plagas, entre ellas, el picudo del algodonero (Anthonomus grandis), generando un impacto negativo sobre la producción y comercialización, lo cual limita la reactivación en el territorio nacional del cultivo del algodonero y reduce su competitividad", dijo el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA).
A través de la resolución 2357, expedida el pasado 14 de julio, se establece como obligatoria la adopción del plan para el establecimiento, la declaración y el reconocimiento de las áreas libres de la plaga.
Uno de los insumos más utilizados para su control es el llamado tubo matapicudo, un tubo pintado de amarillo, untado con atrayente insecticida.