Mientras el director de la Asociación Colombiana de Procesadores de la Leche (Asoleche), Jorge Martínez, advirtió que, como consecuencia de la temporada invernal que afectó el cordón lechero de la Sabana de Bogotá, debería importarse leche, el Presidente de Fedegán, José Félix Lafaurie, calificó la propuesta como de absurda.
Por su parte, el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, la descartó totalmente y pidió a la industria, más bien, subir los precios que pagan a los productores por el litro de leche.
El vocero de Fedegán desestimó todos los argumentos de Martínez, pues considera que los ganaderos que producen leche irían de forma expedita a la miseria, luego de ver inundadas sus fincas y desplazadas sus vacas. “Lo que se ha afectado no es más del 4 por ciento de la producción de leche fresca”, dijo Lafaurie.
El dirigente gremial, por el contrario, pidió a la industria procesadora que, en vez de incentivar esas importaciones, le compre la leche a los ganaderos y a precios justos. Se destaca también que tras los anuncios de la ‘inminente’ importación del alimento no se reseñan que en el 2010 fueron el equivalente a 12 millones de litros de leche fresca.
En general, Colombia importa leche en polvo, evaporada, concentrada y hasta leche líquida. Por último, en carta dirigida al presidente Santos, Lafaurie planteó que se hace necesario exonerar, por dos años, a los productores rurales del pago del impuesto predial, pues se hace necesario comenzar a hacerse las labores de desanegamiento, secado y readecuación de tierras, que podrían demorar ese tiempo de exclusión.