En momentos en que es necesario reanimar el alicaído comercio exterior del país, es necesario hacer varios ajustes que van más allá de la infraestructura.
Tomar medidas de facilitación al comercio, eliminar barreras no arancelarias y avanzar en desarrollo logístico, son parte de las tareas prioritarias.
Así lo señaló ayer el presidente de Analdex, Javier Díaz Molina, durante el VII Foro Nacional de Importadores.
El directivo insistió en que la integración de Colombia en las cadenas globales de valor es muy baja (solo el 6,4% de los insumos necesarios en la producción son importados), y que hay varios elementos que limitan dicha inserción.
Aparte de la baja productividad laboral en Colombia, hay inconvenientes en desempeño logístico, que incluyen demoras en los procesos de aduanas, y costos de transporte.
En este punto, Díaz Molina hace un llamado para que haya más medidas de facilitación del comercio, lo cual incluye alertas rápidas, inspecciones simultáneas, manejo eficiente de las mercancías, entre muchos otros temas.
El directivo explicó que el 87 por ciento de las barreras no arancelarias que enfrentan los exportadores tiene que ver con temas de procedimiento.
Por otra parte, insistió en la necesidad de fortalecer los instrumentos de promoción del comercio, entre ellos las zonas francas.