Un porcentaje de los montos recaudados irá a parar a la Fundación Biofuturo, una entidad sin ánimo de lucro que ayuda a los niños de las zonas marginales de Bogotá.
Una hora antes de que empezara el singular certamen, en el marco del actual Salón del Automóvil en Corferias, sus organizadores se estaban comiendo las uñas, literalmente, porque tan solo habían vendido una paleta: eso, hasta ese momento, quería decir que había un solo participante inscrito.
A la hora de la verdad, el recinto para unas 100 personas se llenó y se dio inicio a la subasta de nueve modelos FZJ73, fabricados en 1995, 1996 y 1997.
Estos autos fueron cuidadosamente restaurados y se les pusieron accesorios especiales para la trocha: el sueño de un gomoso.
El martillo de la subasta tuvo una gran actuación y, entre mucho humor y agilidad, vendió el primer modelo en la nada despreciable suma de 63 millones de pesos, partiendo de un precio base de 40 millones.
Bastaron menos de 60 segundos para que el primer comprador de la noche saltara en un pie de la alegría tras llegar a la cuenta de tres.
Y así transcurrieron los minutos, en medio de la euforia colectiva de asistentes, periodistas y, por supuesto, de los organizadores del certamen.
El más barato se vendió en 58 millones, mientras que el que más plata recogió se lo llevó su nuevo dueño por algo más de 70 millones de pesos.
Federico Schneider, de Distoyota, le dijo a Portafolio.com.co que más allá de la belleza y el significado del fierro, la felicidad que sentía era por el éxito de la subasta y lo que significaría para la población de niños menos favorecida.
A cada uno de los compradores se le obsequiaron accesorios como 'camping', juegos de luces para el carro y eslingas (winches).
A cada uno de estos 4x4 se le realizó una serie de trabajos mecánicos, de latonería y pintura y la adecuación de nuevos accesorios, como barra antivuelco, tres exploradoras delanteras, rines en aleación, llantas radiales rin 15 Pirelli de 33 x 12,5 pulgadas, tiro de arrastre, bómper delantero y trasero y estribos de Easy Hitch.
También se les instalaron volantes deportivos, cinturones delanteros de cuatro puntos y sillas delanteras en lona negra tipo rally. Todos los modelos tienen garantía de 1 año o 25.000 kilómetros.
La casa por la ventana
La misma noche de la fecha en que el Salón del Automóvil abrió sus puertas, otros expositores hicieron fiestas de lanzamiento de sus productos, como Renault, que presentó el campero Koleos, un 4x4 que no existía en el portafolio de modelos de la marca francesa.
Colserauto, el taller especializado en peritajes de vehículos, no se quedó atrás con la inauguración de su stand y su atracción principal: una bella muchacha con el torso desnudo e ingeniosamente decorada con pintura.