El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, se mostró muy satisfecho con el nivel de consumo de los hogares este año. Al término de la Junta del Banco de la República, señaló que “este año la economía del país ha estado impulsada por el consumo de los hogares y la inversión de las empresas”.
Y no es para menos. El solo gasto de los colombianos con tarjetas de crédito alcanzó a octubre pasado 35,4 billones de pesos. Esto significa que el consumo con este medio de pago tuvo un promedio diario de 97.000 millones de pesos o lo que es más diciente aún, de 4.042 millones de pesos por hora. El uso de las tarjetas viene creciendo a una tasa anual de 9 por ciento, al punto que las compras y avances en efectivo realizados en los primeros diez meses del 2013 ya superan el monto total consumido en el 2011, que fue de 33 billones de pesos.
Aunque la cifra parece alta, lo que pueden gastar hoy en día los colombianos con sus plásticos es mayor, pues el cupo sin utilizar es cercano a los 30 billones de pesos adicionales. Banqueros consultados señalan que parte de ese crecimiento se explica porque las personas están aprendiendo a ver las bondades del llamado dinero plástico frente al efectivo, más como un medio de pago que como mecanismo de crédito, aunque este último continúa prevaleciendo. En Colombia el mercado de tarjetas de crédito lo componen más de 11,5 millones de unidades.
Sin embargo, el número de tarjetahabientes solo se acerca a las seis millones de personas, lo que da un promedio de dos ‘plásticos’ por cada individuo. Si bien el 75 por ciento de los consumos con tarjetas son compras directas, tanto en Colombia como en el exterior, un alto (25 por ciento) corresponde a avances en efectivo, una alternativa de crédito que resulta muy costosa para el tarjetahabiente.
Datos de la Superfinanciera indican que por esta vía los colombianos han tomado recursos de la banca por 8,7 billones de pesos. En el 2012 esa cifra alcanzó más de 10 billones. De otra parte, la Superfinanciera dio un parte de tranquilidad en el sentido de que se había logrado frenar el crecimiento de la cartera vencida de las entidades y esto incluye la de las tarjetas de crédito.