Buffett y el vicepresidente de la empresa, Charles Munger, dijeron que Wall Street vendió "las aguas servidas del alto riesgo", culparon a los medios de comunicación y a los reguladores por no detectar el peligro y dijeron que las pruebas de resistencia de las empresas financieras efectuadas por el Gobierno de E.U. no harán que Berkshire entienda mejor las acciones que la compañía posee.
Un número récord de 35.000 personas participaron en la reunión anual de la empresa, con sede en Omaha, estado de Nebraska, el 2 de mayo.
"Pienso que virtualmente todas las personas relacionadas con el mundo financiero contribuyeron a ella", dijo Buffett sobre la crisis. "Parte fue por avaricia y parte por estupidez", agregó.
Las ejecuciones hipotecarias han subido a un récord, el desempleo estadounidense aumentó a su máximo nivel en 25 años y las acciones de Berkshire se desplomaron un 31 por ciento desde que los accionistas se reunieron en el centro de convenciones Qwest Center de Omaha el año pasado.
El Gobierno y la Reserva Federal de Estados Unidos han gastado, prestado o comprometido 12,8 billones de dólares, cantidad que se acerca al valor de todo lo producido en el país el año pasado, para combatir la recesión.
Buffett, de 78 años, utilizó la sesión de preguntas y respuestas de cinco horas en la reunión y la conferencia de prensa que ofreció el domingo para promover las perspectivas a largo plazo de sus apuestas en derivados y explicar su selección de acciones.
Dijo que Wells Fargo & Co., con sede en San Francisco, la segunda participación más grande en la cartera de Berkshire, prosperará independientemente de los resultados de las pruebas a las que se sometió a los principales prestamistas de Estados Unidos.
Beneficios de Berkshire
Warren Buffett dijo a los accionistas en la reunión que se celebró el sábado pasado que espera que a la larga Berkshire obtenga beneficios con sus apuestas en derivados en los mercados mundiales que a finales del 2008 produjeron un pasivo de 10.000 millones de dólares.