La crisis está agotando el empuje de la economía alemana, que apenas crecerá un uno por ciento en el 2013 por la recesión en el resto de la Eurozona y el enfriamiento de la coyuntura global, estiman los principales institutos económicos de Alemania.
En su informe de otoño, que presentaron ayer en Berlín tras entregarlo a la canciller alemana, Angela Merkel, los institutos rebajan con ello a la mitad su previsión de crecimiento del producto internor bruto (PIB) alemán, que en la primavera todavía veían en el dos por ciento para el 2013.
La crisis en la Eurozona, el estancamiento estadounidense y el parón de los emergentes son, a juicio de los expertos, los principales causantes de este retroceso.
“La economía global se encuentra en una fase débil, ha perdido fuerza en todo el mundo, y la confianza de empresas y hogares ha caído aún más”, señala el informe.
“Un importante factor negativo es que desde el año pasado la crisis de deuda ha afectado la confianza de la zona euro”, subrayan los expertos del instituto de estudios económicos de Múnich (Ifo), el Instituto de Estudios Económicos Mundiales de Kiel (IfW), el Instituto de Estudios Económicos de Halle (IWH) y el Instituto de Estudios Económicos de Renania del Norte Westfalia en Essen (RWI).
Así, la primera economía europea, dependiente de su potente sector exterior, crecerá apenas un 0,8 por ciento este año, lejos del 3,6 y el 3,7 por ciento logrados en 2011 y 2010, respectivamente.
El mercado de trabajo se resentirá, asimismo, levemente y la tasa de desempleo, en la actualidad en mínimos históricos, se incrementará levemente hasta el 5,7 por ciento, desde el 5,5 por ciento con que cerrará el presente año.
La inflación permanecerá ligeramente por encima del nivel del dos por ciento recomendado por el Banco Central Europeo (BCE), en el 2,1 por ciento este año y el 2,2 por ciento el próximo, algo que no debería provocar recelos entre los halcones alemanes dentro del banco emisor europeo.
El conjunto de la economía de la Eurozona caerá un 0,5 por ciento este año, según el informe, y avanzará un tímido 0,1 por ciento el próximo año, contando con el empuje alemán.