Este lunes comenzó la recta final de una campaña presidencial que ha dividido profundamente a los brasileños y que es probable que termine con la elección del candidato ultraredechista Jair Bolsonaro.
(Brasil decide su futuro entre izquierda y derecha).
Las encuestadoras dicen que Bolsonaro tiene una ventaja de al menos 14% sobre Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), de cara al balotaje del domingo. Dado que el 95% de los partidarios de Bolsonaro dijo en las encuestas que no considera cambiar su voto, Haddad necesita un giro sorprendente en las urnas para ganar.
Decenas de miles de partidarios de Bolsonaro se reunieron en varias ciudades de Brasil el domingo, en un ambiente más cercano a una celebración que a los mítines electorales previos a una elección. “Esta es una señal clara de que los ciudadanos están realmente preocupados por el futuro de Brasil y quieren en la presidencia a alguien que no sea del PT”, dijo Bolsonaro.
Por su parte, Haddad hizo un llamado para movilizar a la base del PT, compuesta por los sectores más pobres de Brasil, con la promesa de expandir los programas sociales y limitar los costos de los cilindros de gas para cocinar, que se utilizan principalmente en hogares de bajos ingresos.
(Elecciones de Brasil tienen en vilo a la economía de la región).
Bolsonaro es un capitán en retiro del Ejército y diputado durante siete periodos que defiende abiertamente la dictadura militar que gobernó Brasil entre 1964 y 1985. El candidato ultraderechista ha sumado apoyo en un electorado que busca orden después de cinco años marcados por una crisis económica y política.
De hecho, la mitad de los electores brasileños considera que existe la posibilidad de que haya una nueva dictadura en el país, según un sondeo de Datafolha.
Según este documento, un 31% de los votantes brasileños respondió que “hay una gran posibilidad” de un nuevo régimen autoritario como el que imperó entre 1964 y 1985, mientras que otro 19% afirmó que existe “una pequeña” probabilidad de ello. El 42% rechazó por completo ese supuesto y el 8% restante no supo qué contestar.
El índice de encuestados que creen que es posible que en el país se repita una dictadura creció 11 puntos porcentuales respecto a un anterior sondeo sobre el asunto, de febrero de 2014.
El apoyo a Bolsonaro consolidaba la ventaja contra, pues la última consulta, realizada por el instituto MDA mostró que Bolsonaro tiene un 57% de apoyo frente a un 43% para Haddad. Las cifras están en línea con otros sondeos que muestran que Bolsonaro tendría un 59%, según Datafolha, o un 60%, según BTG/FSB.
VOTO POR HADDAD
Más de 350 economistas, entre ellos un premio Nobel, publicaron un manifiesto en el que advierten sobre los riesgos que significaría para la democracia una victoria de Bolsonaro.
Los signatarios del “Manifiesto de economistas por la democracia brasileña” indican que existen entre ellos divergencias y que muchos son “críticos contundentes” de los gobiernos del Partido de los Trabajadores (PT). Pero esas divergencias pasan a segundo plano, porque “lo que ahora está en juego es el régimen democrático brasileño y las instituciones del Estado de derecho”, afirman.
La proclama se desmarca del respaldo obtenido por Bolsonaro entre los inversores, atraídos por las propuestas de su asesor Paulo Guedes. El que podría ser el próximo responsable de las finanzas es favorable a una política de privatizaciones para reducir la deuda pública y de recortar impuestos, con el propósito de animar una economía.