Cada vez que había un anuncio en Venezuela relacionado con la política cambiaria o con medidas económicas estas noticias se reflejaban con una caída dramática en la acción de Dana, la fabricante de ejes y partes para automotores, en la bolsa de Nueva York.
Esta fue una de las principales razones por las que la empresa decidió vender sus activos en este país, sumado a que encontraron un comprador con una oferta atractiva.
El negocio, que fue concretado desde Colombia, centro de operaciones para la región Andina de la empresa estadounidense, se hizo con la firma venezolana Manufacturing and Logistics Solutions Limited, quienes se quedarán con la licencia para utilizar el nombre Danaven.
De acuerdo con Carlos Alberto Estrada, encargado de las operaciones de la multinacional en Ecuador y Colombia, la transacción incluyó las dos plantas que fabricaban componentes para ejes diferenciales y una fábrica de tubos para ejes y cardanes. Sostuvo además que el equipo de trabajo, conformado por venezolanos, se mantendrá.
“La empresa también firmó unos acuerdos de asistencia técnica para continuar soportando los clientes globales de Dana desde Venezuela. También desde Colombia proveeremos componentes para la fábrica, Danaven se convierte en nuestro cliente”, sostuvo el ejecutivo.
Aunque la empresa no reveló datos exactos sobre el monto de la transacción, sostuvo en un comunicado que espera que su ingreso neto, atribuible a esta empresa, sume unos 77 millones de dólares para el balance del cuarto trimestre del 2014.
La filial venezolana representaba ventas por 110 millones de dólares, cifra cercana al 25 por ciento de las ventas totales de la empresa en Suramérica. Sin embargo, de acuerdo con la compañía esta transacción no impactará el Ebitda de la compañía y antes servirá para fortalecer las operaciones de la firma en Colombia y Ecuador.
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