España duplicó con creces sus importaciones de petróleo latinoamericano en los cinco primeros meses del año y recortó sus embarques desde Irán, mostraron datos oficiales, mientras se preparaba para una prohibición de la Unión Europea (UE) contra el crudo iraní, que entró en vigor el 1 de julio.
El año pasado, España importó el 14 por ciento de su petróleo desde Irán.
España, que debe atender un 75 por ciento de sus necesidades energéticas con importaciones, adquirió 22,6 millones de toneladas de crudo entre enero y mayo, tras haber importado un total de 52 millones de toneladas en todo el 2011.
Datos de la corporación de la reserva estratégica de petróleo española mostraron que las importaciones desde Latinoamérica crecieron el 103 por ciento, incluyendo un incremento de 29 por ciento en las importaciones desde México, a 3,5 millones de toneladas entre enero y mayo.
España importó otras 1,5 millones de toneladas de crudo de Colombia, un alza desde solo 75.000 toneladas en el mismo periodo del año pasado, y 990.000 toneladas desde Venezuela, contra 63.000 toneladas.
Los datos también mostraron una caída de 18 por ciento en las importaciones desde Rusia.