Los precios del petróleo se debilitaron el jueves, ante una abundancia global de suministros que presionó al mercado mientras el contrato de crudo Brent para junio se acercaba a su expiración.
La sesión fue volátil mientras los participantes trataban de prepararse para factores alcistas, entre ellos la reciente caída en los inventarios estadounidenses, demanda física de crudo en Asia y la intranquilidad en Oriente Medio, con fundamentos básicos de suministro de inventarios históricamente altos y vasta producción.
El contrato de crudo Brent para junio, que estaba expirando, bajó 22 centavos y cerró a 66,59 dólares por barril.
El Brent para julio perdió 57 centavos, a 66,70 dólares.
El contrato para junio del crudo referencial estadounidense bajó 62 centavos, a 59,88 dólares por barril.
El petróleo nominado en dólares subió empujado en las primeras operaciones por la debilidad de la moneda estadounidense, pero posteriormente la divisa se recuperó desde niveles mínimos.
Pero los operadores se focalizaron en el persistente exceso de demanda y en los dispares datos económicos globales.
Mientras tanto, aunque las existencias de crudo en Estados Unidos cayeron por segunda semana consecutiva, en 2,2 millones de barriles, tras cuatro meses de alzas continuadas, los inventarios seguían aún casi 90 millones de barriles por encima de esta misma época el año pasado.
Un inesperado incremento en marzo del bombeo en Dakota del Norte, en el segundo mayor estado productor de Estados Unidos, también se sumó a los temores sobre la oferta.
El petróleo de Texas bajó un 1,02 % y cerró en 59,88 dólares el barril.
La Agencia Internacional de Energía advirtió el martes que el superávit global de suministros está aumentando.
El crecimiento global de la demanda de combustibles también estaba en duda, y la incertidumbre de los indicadores económicos impulsó a la baja el crudo en las primeras operaciones matinales.
En China, el mayor consumidor mundial de energía, la economía perdió más ímpetu en abril pese a un alivio en la política monetaria, mientras que la mayor economía de Europa, Alemania, se desaceleró en el primer trimestre.
En Estados Unidos, las ventas minoristas se mantuvieron sin cambios en abril, afectando las esperanzas de un fuerte repunte en el crecimiento en el segundo trimestre.
Reuters