Genscape publicó un informe asegurando que las reservas aumentaron 1,7 millones de barriles de petróleo durante la semana pasada en Estados Unidos (EE. UU.), una cantidad menor a la esperada.
Sin embargo, un sondeo preliminar de Reuters muestra que los inventarios crecieron 4,2 millones de barriles.
La producción en el campo Eagle Ford, en Texas, redujo su producción de barriles, lo cual pudo haber presionado al alza el precio del WTI.
También la noticia del cierre de 64 plataformas de extracción en EE. UU. incidió sobre las preferencias de los inversores.
Los operadores se aferraron a la disminución de las reservas, y en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), el barril de petróleo WTI cerró al alza con una ganancia de 0,39 centavos (50 dólares) respecto al cierre del viernes.
Analistas de Goldman Sachs afirmaron en una nota a sus clientes que los precios del petróleo se ubicarán sobre los 40 dólares por barril.
La prima entre el Brent y el crudo de Texas se redujo a menos de 9 dólares por barril, perjudicando a algunos operadores que apostaron a que el diferencial se ampliaría esta semana.
El Brent, presionado por la compra de bonos por parte del Banco Central Europeo (BCE), cerró la jornada con un caída de 2 % (-1,20 dólares) cotizándose en 58,53 dólares por barril.
Los operadores dijeron que una orden ejecutiva de Estados Unidos contra Venezuela y sanciones contra ciertos individuos en el país también tuvieron un efecto sobre el Brent, aunque un funcionario de alto rango del Gobierno de Obama dijo que la orden no apunta contra la industria petrolera venezolana.
Agencias