La decisión de realizar un posgrado no debe ser tomada únicamente desde el punto de vista económico, sino desde el profesional, ya que gracias a esta elección se estará mejor preparado para enfrentar el mercado laboral.
De acuerdo con los datos del Observatorio Laboral para la Educación del Viceministerio en Educación Superior “los posgrados son los niveles que más han aumentado el número de graduados, en particular, de 2010 al 2012 en maestría aumentó el 49% y en doctorado el 47%”.
Así que si usted está interesado en dar un paso adelante en su formación profesional estudiando una especialización, maestría o doctorado, pero le preocupa los recursos económicos que requiera para ello, lo primero que debe tener presente es que nunca se gasta en educación, por el contrario se invierte. Lo más importante es tener claro el programa académico que se desea estudiar, lo demás vendrá por añadidura.
En este orden de ideas, fundaciones, Instituciones de Educación Superior, Gobierno Nacional y bancos, entre otros, han hecho un esfuerzo por tener un portafolio de alternativas accesibles a todos los bolsillos e intereses de los profesionales, las hay desde becas que cubren el 100 por ciento del valor del posgrado, hasta créditos con aprobación inmediata y tasas de interés que benefician al estudiante.
En tal sentido, Fernando Rodríguez Carrizosa, presidente de Icetex, manifiesta que entre 2010 y 2013 la institución otorgó créditos con recursos propios para posgrado a 29 mil postulados, de esta cifra 12 mil recibieron su empréstito en 2013, con una inversión de 220 mil millones de pesos.
¿QUÉ OFRECEN LAS ENTIDADES BANCARIAS?
Los bancos hacen parte de la lista de alternativas que existen para la financiación de estudios de posgrados. Estos cuentan con líneas de crédito estudiantil que ofrecen diferentes modalidades de pago, así como tasas de interés, cuotas fijas y aprobación inmediata; no requieren de codeudor y aportan incentivos,entre otros beneficios.
Algunas entidades bancarias tienen convenios directos con las universidades, lo cual facilita el trámite de solicitud de financiación. Las opciones están dadas, el abanico de posibilidades es amplio, solo basta con fijarse metas. Sin embargo, el tiempo se vuelve un aliado estratégico; es mejor no apresurarse en la toma de decisiones sobre cómo financiar su programa de posgrados, tómese el tiempo necesario para realizar todas las consultas posibles.
