Invertir en el mercado de capitales dejó de ser tema exclusivo de grandes potentados. Gracias a que las empresas y el propio gobierno se han dado cuenta de que por esta vía pueden conseguir financiación ‘barata’ y con buenos plazos, los inversionistas tienen varias opciones donde poner su dinero a rentar.
Aunque los bonos respaldados por el Gobierno ofrecen mayor seguridad que los corporativos, estos últimos han cobrado protagonismo dada la trayectoria de las compañías que los garantizan.
Solo en los primeros dos meses del 2013, cerca de 10 compañías han conseguido recursos a través de emisiones de bonos por unos 3 billones de pesos y se espera que en todo el año ese monto supere los 10 billones de pesos, muestra del apetito que hay entre los inversionistas por este tipo de activos, considerados por muchos como seguros, en la medida que ofrecen un retorno fijo sobre la inversión.
Mientras tanto, las cuentas de ahorro y los certificados de depósito a término (CDT) se pusieron de nuevo en moda por cuenta de los mejores rendimientos.