Una de las principales estrategias de los grandes supermercados para incentivar las compras por parte de los usuarios es la acumulación de puntos, pero se debe tener en cuenta que su redención no se trata de solo premios sino de estar de lado de cada usuario estableciendo premisas particulares para cada parte, satisfaciendo necesidades particulares.
Por ésta razón, los beneficios intangibles o emocionales están haciendo la gran diferencia frente al mercado.
Frente a esto, Rodrigo Gamba, Gerente Comercial de Loyalty Marketing Services (LMS), explica que “una de las principales estrategias de los grandes almacenes en Colombia es la acumulación de puntos a cambio de beneficios o productos gratis para incentivar las compras”.
“La mejor forma de incentivar el consumo fijo en determinado almacén, es premiando la fidelidad”, agregó.
Actualmente, en el tema de redención de puntos, la tecnología es la categoría más activa, seguida de hogar. Sin embargo estos son beneficios tangibles.
Para Rodrigo Gamba, se debe empezar a priorizar estratégicamente los beneficios intangibles o emocionales “no se trata de solo premios sino de conocer las necesidades particulares de los usuarios, lo que muestra un involucramiento directo entre los usuarios y las marcas” indicó.
Para este proceso, se desarrollan alternativas que se ajustan a cada marca, bajo sus segmentos, los cuáles deben ser manejados única y estratégicamente.
”En el mercado existen varias opciones como por ejemplo compra de productos especiales, montos por dinero o por topes de ventas entre otros”, profundizó Gamba.
De otra parte, a nivel Latinoamérica según estudio realizado por la consultora Deloitte, de más de tres mil personas encuestadas en la región, más de la mitad de los consumidores considera que la condición de sus respectivas familias es mejor que la de 2012, y el 67 por ciento de consumidores latinoamericanos proyectan gastar más cantidad de dinero que lo destinado en los años inmediatamente anteriores.