Aunque en rigor sea el legítimo replanteamiento de una empresa, para el mundo literario se trata de un auténtico golpe: la editorial Norma, responsable de llevar al mercado algunas de las más exitosas obras literarias de los últimos años, decidió cerrar sus áreas de ficción y no ficción, como parte de un proceso de reorientación en sus negocios.
La decisión se enmarca en un proceso de focalización en el sector educativo tomada en Colombia por Carvajal Educación, nueva denominación legal del Grupo Editorial Norma, que ahora se orientará a las líneas infantil y juvenil, textos escolares, diccionarios, soluciones educativas e incluso papelería, entre otras.
De acuerdo con un comunicado oficial de la empresa, la meta ahora es "convertirse en la compañía latinoamericana que ofrece el portafolio más completo de productos y servicios para atender a todos los actores del sector educativo".
Sin embargo, eso también implicará "desinvertir de manera paulatina (...) en líneas de negocio que no atienden de manera directa este mercado". Éstas son las de ficción adultos, no ficción, verticales de bolsillo, y autoayuda y crecimiento personal.
La decisión determina el cese de una fórmula que en Chile había sido especialmente exitosa, con la publicación de autores como Roberto Ampuero (‘La otra mujer’) y Pablo Simonetti (‘La barrera del pudor’ y la reedición de ‘Vidas vulnerables’), quienes lideraron en su minuto el ránking y lograron ventas por cifras cercanas a 30.000 ejemplares.
Similar es el caso del área de autoayuda y crecimiento personal, en que Pilar Sordo anotó ventas por hasta 70.000 ejemplares con títulos como ‘Viva la diferencia’. En esta línea publicaba también el astrólogo Pedro Engel, cuyo horóscopo lograba cada año importantes volúmenes de comercialización.
Ello permitió además que Norma Chile se permitiera algunas apuestas, como ocurrió este año con la novela gráfica ‘1899’, o anteriormente con compilados como ‘Cuentos chilenos de terror’.
Por esto la determinación de Carvajal Educación habría golpeado especialmente en la sede chilena de Norma, destacada habitualmente entre sus pares latinoamericanos, y en oposición a casos como el mexicano y el argentino, cuyos insatisfactorios resultados habrían llevado a la decisión del cierre global de las áreas mencionadas.
La conversión hacia un perfil netamente educativo será, de todos modos, paulatina, y debería materializarse definitivamente en los primeros meses de 2012.
Entonces, además, serán devueltos los derechos de edición a los autores que tenían contrato vigente con la editorial, para la publicación de los títulos comprometidos.
El pasado miércoles el Grupo Carvajal anunció que como parte de su plan para concentrarse en libros de educación (texto), saldrá de cuatro líneas del negocio.
Se trata de libros de ficción para adultos, no ficción, verticales de bolsillo y autoayuda o crecimiento personal. En Argentina también se sorprendieron con la decisión, según dice el diario Clarín.
GDA-EL MERCURIO