Leopoldo Pellón, gerente de Sacyr Concesiones Colombia, y Jesús Revilla, director de Latinoamérica Sacyr Construcción, hablan del pulso que mantiene el consorcio con la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y de la situación de la empresa en Colombia, donde asegura que la ANI les exige un estricto cumplimiento de los contratos y que nada tuvieron que ver los problemas del pasado –Commsa y Vías Férreas– con la actualidad.
¿Cree que otros precalificados en procesos en Colombia se benefician de la decisión de Sacyr en Panamá?
No lo creo. Las compañías que concurren son profesionales. Participamos con ellas en obras por todo el mundo.
En esta ocasión podemos ser rivales, pero en otros concursos podemos ser aliados.
Los procesos abiertos en el programa de Cuarta Generación constituyen contratos de concesión bajo los estándares internacionales.
Además, el adjudicatario se convierte en colaborador de la administración durante muchos años, por lo que la implicación es total. Este hecho marca una diferencia sustancial con contratos de obra pública como el del Canal de Panamá.
¿Cree que la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) los mirará ‘con lupa’ a partir de ahora?
Sin lugar a dudas. Estamos seguros de que la ANI nos exigirá, como al resto de proponentes, el cumplimiento de las condiciones impuestas para que nuestra oferta sea declarada hábil en el proceso licitatorio.
La ANI está llevando a cabo unos procesos muy serios y rigurosos que son garantistas con los intereses del Estado.
Ya en el pasado tuvieron problemas en Colombia (Commsa y vías férreas). ¿Por qué fue?
Esos proyectos corresponden a una época muy diferente de la actual. En aquel tiempo había otras circunstancias económicas, sociales y políticas que, en el caso de Commsa, hacían irrealizable la ejecución, y perturbaron la financiación internacional de un proyecto de esa envergadura.
El consorcio hispano-colombiano hizo todo lo que estuvo en su mano, incluido un proyecto técnico de gran calidad.
¿Qué garantías hay, en el caso de que ganen las licitaciones, de que las obras salgan adelante?
Contamos en cada uno de los países con los mejores socios y con el respaldo del sistema financiero.
La solvencia financiera ya ha quedado plasmada y asegurada en las precalificaciones obtenidas y en la obtención de los fondos necesarios en los más de 30 proyectos concesionales vivos que tiene la sociedad, con la confianza de entidades financieras de todo el mundo.
‘LA OFERTA FUE SOLO 7 POR CIENTO INFERIOR’
El director para Latinoamérica Sacyr Construcción, Jesús Revilla, afirmó que esta coyuntura no afecta a la Marca España, ‘cuyo buen hacer e ingeniería son internacionalmente reconocidos’.
Además de ello, ratificó que Sacyr tiene sus cuentas perfectamente saneadas.
España tiene constructoras participando en grandes proyectos en el exterior, y el Canal de Panamá es una obra con un alcance mediático gigante. ¿Cómo está afectando esta coyuntura a la Marca España?
La Marca España está consolidada internacionalmente con la experiencia de las empresas españolas, y un caso puntual en el que la obra, con un desarrollo de un 70 por ciento, está en su fase final, no tiene ninguna influencia.
Los valores del país y de sus profesionales están muy por encima.
¿Están saneadas sus cuentas; hay, detrás de todo esto, algún problema financiero en la empresa?
Sacyr tiene sus cuentas saneadas, como se puede comprobar en los resultados alcanzados hasta septiembre, en los que se obtuvo una ganancia de explotación de 550 millones de dólares. Por tanto, no hay ningún problema financiero.
¿Por qué salen al exterior a buscar proyectos?
Hoy, el 80 por ciento de la cartera de construcción y el 65 por ciento de la de concesiones están fuera de España.
Estamos apostando por América Latina: Chile, Colombia y Perú son los tres mercados donde más está construyendo Sacyr.
¿Cree que la compañía pueda salir perjudicada después de este escándalo en el Canal de Panamá?
No, ya que estamos convencidos de la razonabilidad de nuestras reclamaciones y, a la vez, creemos que las diferencias con el cliente se pueden resolver dentro del contrato, respetando las leyes panameñas, y que la obra concluya satisfactoriamente.
¿Ofrecieron un menor valor, sin medir las consecuencias, solo para quedarse con el contrato del Canal?
GUPC realizó una oferta acorde con el proyecto de la licitación, siendo únicamente un 7 por ciento inferior al presupuesto de referencia de la ACP.
El proyecto que GUPC presentó permitirá un incremento del tránsito por el Canal de 2,2 barcos más al día sobre el diseño conceptual entregado por la ACP, lo que supone 1 millón de dólares al día de ingresos adicionales para la Administración. La propia ACP ha reconocido que la oferta adjudicada era la mejor con diferencia.
¿Se ofreció en Panamá la suficiente información técnica o la geología es más compleja de lo que aparentemente parecía?
La envergadura y complejidad de este proyecto hace difícil que los estudios previos detecten todas las singularidades.
Por ello, y a pesar de los estudios realizados por la ACP, no se detectaron diferentes fallas geológicas a lo largo de 2,5 kilómetros de las esclusas del Pacífico, ni fueron bien evaluadas las existencias reales y características exigidas de basalto en la traza que permitiera su utilización como agregado en la fabricación del concreto.
De hecho, el basalto adecuado no pudo obtenerse de donde la ACP dijo que se obtendría y ha habido que comprarlo en otras canteras con el consiguiente desvío presupuestario.
¿Qué implica para el comercio mundial que no se construyan las esclusas a tiempo?
Confiamos en que los plazos se cumplirán gracias al acercamiento de posturas y que el comercio mundial se beneficiará muy pronto de este gran avance.
Inmaculada Iglesias
Redacción Economía y Negocios