Con una inversión de 3.296 millones de pesos en sus tres años de creada y el apoyo a cerca de 2.800 personas de grupos vulnerables y poblaciones de base del sector automotor de la sociedad, la Fundación Chevrolet ha logrado articular proyectos de impacto conectando organismos y entidades gubernamentales con la empresa privada, en una estrategia de sostenibilidad social.
La Fundación, como lo explica Fernando Alonso, su director Ejecutivo, es el vehículo de inversión social de GM Colmotores y trabaja en tres líneas específicas: generación de oportunidades de empleo y de negocios en poblaciones con dificultades para acceder a estudio y trabajo, y en planes de capacitación y formación.
“Por ejemplo, en la línea de generación de empleo tenemos dos programas, uno de empleabilidad y otro de encadenamientos productivos inclusivos”, indica Alonso.
PACTO MOTOR
El proyecto más grande que adelanta en estos momentos la Fundación Chevrolet es el ‘Pacto Motor’, que hace parte del programa de empleabilidad, que busca mejorar las posibilidades de acceder a trabajo formal de jóvenes vulnerables, quienes a través de una alianza entre la Secretaría de Desarrollo Económico, la Sociedad Salesiana, 12 empresas del sector automotor y de transporte, y la Fundación Chevrolet reciben formación en mantenimiento y reparación de vehículos.
“El programa, por ahora está solo en Bogotá, pero esperamos llegar a Medellín con la Secretaría de Desarrollo de esa ciudad”. Ya se han beneficiado 393 jóvenes, y de ellos 150 son especialistas en técnicas de mecánica y pintura, logrando que el 60 % se vinculen laboralmente.