En mayo, hicieron falta menos de 96 horas para que la venta de Isagén fuera una realidad. A falta de cuatro días, la subasta tuvo que ser suspendida por una demanda, que meses después el Consejo de Estado definió a favor del Gobierno. Sin embargo, y a pesar de tener ya el visto bueno del alto tribunal, la oportunidad del Estado de recibir 1.994 millones de dólares ya había pasado. Quienes se resisten a la venta consideran que lo que valía en mayo no cuesta ahora.
Esta es una de las más recientes quejas de los opositores, quienes aducen que el precio de la hidroeléctrica se ha abaratado por cuenta de la devaluación y que de venderse implicaría un detrimento patrimonial.
Y es que mientras el Consejo de Estado definía la suerte de la enajenación, el peso colombiano se devaluaba desenfrenadamente. Debido a esa apreciación del dólar, hoy en día las cuentas, por la venta de la central de energía, no cuadran para muchos.
El 19 de mayo se pagaba aproximadamente 1,27 dólares por cada una de las 1.570 acciones que iban a salir a la venta, mientras que a la fecha se pagaría alrededor de 1,05 o 1,06 dólares, lo que le restaría casi un 15 por ciento al valor que había pensado el Gobierno al inicio de año.
De acuerdo con José Roberto Acosta, miembro de la Red Justicia Tributaria, en caso de que se haga una subasta, “la banca de inversión encargada de valorar la empresa debe actualizar el valor, pues Isagén también recibe ingresos en dólares”.
Frente a ese tema, el ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas ha señalado en varias oportunidades que el precio del dólar no afecta la venta porque al tratarse de un activo colombiano la cotización se hará en pesos.
Sin embargo, Portafolio.co conoció que el ministro Cárdenas le ha pedido a Unión Temporal de Credit Suisse, la banca de inversión que asesora al Gobierno, que se valore un nuevo precio teniendo en cuenta este aspecto.
LOS OTROS 'PALOS EN LA RUEDA' AL NEGOCIO
Además de llamar la atención sobre el precio que valdría hoy Isagén, los opositores tienen listas otras medidas para tratar de impedir la venta: una demanda podría ser otra vez el palo en la rueda de la negociación.
Desde julio de 2013, cuando el Gobierno anuncio la enajenación de la hidroeléctrica como una forma de financiar las obras de infraestructura de cuarta generación (4G), se creó, paralelamente, el Comité por la Defensa de Isagén.
Hoy, luego de varios ires y venires y de que el Consejo de Estado fallara a favor de la venta, este comité se sigue resistiendo y continúa en su lucha, a pesar de que la enajenación parece un hecho.
Entre las medidas para impedirlo está desde enviar cartas a los presidentes de las juntas directivas de las tres empresas, que siguen en la puja para comprar la hidroeléctrica, hasta unirse con partidos políticos y organizaciones sociales, académicas, sindicales e incluso artísticas.
Para los voceros del comité no se trata de medidas desesperadas sino de una manera de abrir los ojos de las consecuencias que puede traer la privatización.
No obstante, con el fallo del Consejo de Estado, el panorama se complica para este grupo, entre los que se encuentran abogados, senadores, sindicalistas y otros líderes de la opinión pública.
Y es que con esta decisión, jurídicamente la venta es legal en este momento.
“En este etapa lo que estamos mirando es qué caminos jurídicos hay todavía disponibles”, le dijo a Portafolio.co el abogado Mario Alejandro Valencia de la firma Justicia Tributaria y uno de los miembros de este comité.
“En este momento hay una demanda en curso en la que el Consejo de Estado no ha fallado aún. Está pendiente de una decisión. Ese es el recurso jurídico que consideramos más importante para frenar la venta. Aunque hay otros, este es en el que más confiamos”, comentó Valencia.
Según él, además del camino jurídico, también tienen un ‘as’ bajo la manga en materia política.
“El camino político tiene el objetivo de llamar la atención por la inconveniencia en la venta de Isagén, porque realmente desde el punto de vista legal no tiene ningún obstáculo. Es decir, el Gobierno tiene vía libre para venderla porque el Consejo de Estado autorizó la enajenación, pero nosotros queremos enviar un mensaje político y poner los reflectores hacia el Gobierno Nacional. Desde el Congreso de la República hemos presentando un proyecto de ley, que hemos denominado La “Ley de Isagén”, que tiene como objetivo declarar al sector energético como sector estratégico nacional y eso implicaría que la decisión de venta de una empresa del sector energético tendría que ser aprobada por el congreso de la República”, dijo Valencia.
En los dos años que lleva el proceso de venta, el comité ha puesto más de 11 recursos legales y realizando movilizaciones dentro y fuera del congreso.
Recientemente el comité anunció que delegados de varios partidos políticos (Partido Liberal, Polo Democrático, Alianza Verde, Centro Democrático y Mais) se adherirían a sus iniciativas como lo han venido haciendo desde hace dos años.
¿QUÉ VIENE AHORA?
Mientras el Gobierno define una nueva fecha de la subasta, los miembros de Comité de defensa de Isagén continúan a la espera del fallo que pueda trabar nuevamente la venta.
Fuentes consultadas del Ministerio de Hacienda le dijeron a este portal que los delegados para la venta de Isagén siguen trabajando en definir el nuevo cronograma, pero que aún no se han pronunciado sobre la fecha exacta.
El fallo del alto tribunal autorizó restituir cuatro meses y diez días al plazo establecido en el decreto 1512 para que el Gobierno Nacional reanude y culmine el programa de enajenación de la participación accionaria que la nación tiene en Isagén.
Esto significa que además del plazo de un año que el Gobierno prorrogó en septiembre del año pasado con el decreto 1512 para enajenar las acciones, el Consejo de Estado le da cuatro meses más para que se lleve a cabo la negociación, o el tiempo que la Nación disponga.
Javier Acosta
@javaco18