La principal medida económica adoptada por el primer ministro, Narendra Modi, fue la ‘desmonetización’, consistente en la obligación de cambiar los antiguos billetes de 500 y 1.000 rupias por billetes nuevos para detectar e incautar dinero falso, ilegal y recursos vinculados al terrorismo.
El gobierno declara haber detectado 1,7 millones de casos sospechosos, identificación de 2,32 millones de cuentas bancarias que tienen 3,68 trillones de rupias al tiempo que se duplicó el uso de tarjetas de crédito y se triplicó el pago por celulares. Además, el gobierno proclama haber controlado 16,3 billones de rupias de propietarios desconocidos, y 292 billones de ingresos no justificados. (The Telegraph, Kolkata 18/ 12/ 17).
La economía india creció 8 por ciento entre el 2005 y el 2009, más del 7 por ciento entre el 2010 y el 2014, y ahora ha caído al 6 por ciento. Aunque está dinamizada por el mercado interno rural, la sequía del 2014 y el 2015 arruinó a campesinos y granjeros. Modi lanzó la campaña ‘Hecho en India’ para atraer inversores extranjeros, pero los analistas atribuyen la escasa respuesta a lo que califican de rigidez laboral.
Además, Modi estableció el impuesto al consumo (GST) y aunque era un tributo pendiente, se cuestiona el momento de recesión en el que se ha establecido. A esto se agregan los problemas técnicos para su pago, pues supone tener computador, acceso a internet y competencias técnicas para operarlo, por ello los pequeños negocios o la economía informal encuentran especial dificultad para su implementación.
Respecto al empleo, el Primer Ministro prometió crear 10 millones de empleos al año, pero esta lejos de alcanzar esa meta; actualmente, la tasa de desempleo es del 5 por ciento, la peor en varios años.
El gobierno indio mantiene control de precios de medicinas e instrumentos médicos para contener el aumento de los costos de la salud en el marco de la estrategia ‘Hecho en India’, que busca incrementar la proporción de componentes nacionales en los productos. Por ello, la Autoridad Nacional de Precios de Medicamentos controló el valor de 51 medicamentos, incluidos los de tratamiento de cáncer, corazón y enfermedades de la piel, así como instrumentos quirúrgicos como stents coronarios e implantes ortopédicos.
Por otro lado, la diáspora de migrantes indios por el mundo asciende a 15,6 millones –equivalente al 6 por ciento del total de migrantes globales–, de los cuales 3,5 viven y trabajan en Emiratos Arabes, dos millones en Estados Unidos, 1,9 en Arabia Saudita y un millón en Kuwait. Los indios son apetecidos por las empresas digitales y de información por su dominio del inglés, su capacidad técnica y disciplina de trabajo. India cuenta con una población joven, bien educada y atraída por las nuevas tecnologías (217 millones tienen una cuenta en Facebook, la segunda nación del mundo).
India intenta, pues, un camino heterodoxo, ciertamente difícil.