La evaluación de la Contraloría General de la República acerca de la asignación y ejecución de las regalías, encontró que el 36 por ciento de los recursos se dirige a sectores que inciden en las condiciones de vida de la población (educación, agua potable, vivienda, salud, inclusión social), un porcentaje bajo, dadas las necesidades básicas por atender. El restante 64 por ciento son para transporte, ciencia, tecnología, cultura, recreación y deporte.
Según la Contraloría, los resultados de la aplicación de las regalías son muy pobres, pues el Fondo de Desarrollo Regional solo financió nueve proyectos regionales, que representan el 2,7 por ciento del número de proyectos y el 6 por ciento de su valor. Pese a que el 67 por ciento de la contratación de las obras financiadas con regalías se hace por concurso, el 72 por ciento se realiza con un solo oferente, y al sumar la contratación directa (33 por ciento) tenemos que el 85 por ciento de la contratación se realiza sin pluralidad de oferentes (Citado por Hernandez Gamarra, 2016).
La Comisión de Ciencia y Tecnología y la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales han sostenido que el Sistema General de las Regalías, que regionalizó las regalías, ha puesto estos recursos a merced de aprobación de políticos presionados por sus electores, distorsionando la financiación de la actividad científica.
La comisión propone reestructurar, de manera urgente, el mecanismo de gestión y aprobación de los proyectos financiados con regalías, y para ello estas deberían estar a cargo de la Nación, en un fondo de ciencia tecnología e innovación.
Existía temor de que los municipios cayeran en pereza fiscal, reduciendo el recaudo tributario, confiados en los recursos de las regalías. Pese a que se elevaron los ingresos de regalías entre el 2002 y el 2008, los ingresos propios de los gobiernos locales aumentaron a una tasa mayor que las mencionadas transferencias, pero el sistema de recaudo todavía es muy ineficiente pues no todos los municipios cuentan con una estructura adecuada de recaudo fiscal. (Zapata, 2016).
En conclusión, los balances realizados al sistema de regalías muestran un impacto positivo en la distribución equitativa de los recursos, pero la administración de estos recursos y el impacto de la corrupción en su ejecución no han permitido que la incidencia de esos recursos se manifieste en el desarrollo de la población.
Se puede afirmar que ahora todos los territorios tienen acceso a las regalías, pero la forma en que se vienen ejecutando no generan un cambio que beneficie a la población.
*Profesor U. Nacional y Externado
Colaboración de Nicolás Cruz
COLUMNISTA
Regalías: lo bueno, lo malo y lo feo
POR:
Beethoven Herrera Valencia
-
guardar
save_article.message.success_title save_article.message.successsave_article.message.success_updated_title save_article.message.success_updatedHa ocurrido un error al intentar guardar este artículo
- Reportar error
- Seguir economía
Lo más leído
1
3607
Industrias
Téngalo en cuenta: estas son las rutas aéreas en las que más turbulencias se registran
Destacados
Más Portales
Nuestros columnistas
día a día
Lunes
martes
Miércoles
jueves
viernes
Alex Bouaziz
¿Es el fin del sueño americano?
Las capacidades, no la ubicación, serán el factor determinante de las oportunidades de empleo.
Rodolfo Segovia S.
Petro tenaz
Rafael Herz
Liviandad y crueldad
Luis Arango Nieto
El Cerrado brasileño: ejemplo para la Altillanura
María Sol Navia V.
El Estado no controla parte del territorio
Cesar Pabon
¿Cautela o relajamiento?
Jorge Restrepo
¿Perdemos a Ecopetrol?
Eduardo Behrentz
Seguridad: fundamento de la democracia
Carlos Tellez
Estrategias obsoletas
El direccionamiento estratégico va tomando forma sobre la marcha, incluso por inercia.
Mario Hernández Zambrano
Estoy jugado por Colombia ...
Cristina Vélez
El privilegio del voluntariado
Otros Columnistas
Cotización a pensiones se cuenta en días
Otros Columnistas
Abriendo puertas, cerrando heridas
Ricardo Santamaría
Constituyente: ¿Para qué?
Enfóquese en lo que pueda hacer bien hasta el 2026 y permita que la democracia siga su curso.
Camilo Herrera Mora
A los caricaturistas
La capacidad de decir algo fuerte, con pocas palabras e imágenes, es la virtud de haber comprendido.