Por haber estado involucrado como viceministro en la cartera que ahora ocupará como titular, la verdad es que no habrá necesidad del conocido empalme.
No obstante, sería bueno que el funcionario inicie sus labores aclarando las cuentas del sector que ahora tiene a su cargo. La razón es que más de un observador se sorprendió ayer con el anuncio hecho por el Presidente de la República en Cali, cuando afirmó: “ya sobrepasamos el millón de viviendas que prometimos en la campaña”.
Haber alcanzado semejante hito con 15 meses de anterioridad al fin del Gobierno no es un tema menor. Bajo esa perspectiva, la locomotora no solo anduvo lo esperado, sino que fue más lejos.
El problema es que las cuentas no dan. Para comenzar, en febrero del 2013 la saliente ministra Beatriz Uribe habló de 255.000 unidades en el primer año y medio de la administración Santos.
Bajo esa óptica, en algo más de 15 meses se habrían asegurado los tres cuartos de millón restantes.
Empero, todo indica que el mandatario tiene otras fuentes.
Según sus datos, hay medio millón de casas construidas, en construcción o en proceso, aparte de 100.000 gratis, 100.000 para los que ganan entre uno y dos salarios mínimos, y 50.000 que salen de los subsidios a la tasa de interés, para un subtotal de 750.000.
A ese número hay que agregarle 80.000 del Fondo de Adaptación, 130.000 rurales y 85.000 en 10 macroproyectos que se acaban de destrabar, con lo cual se obtendría la meta. Todo depende, claro está, de que no haya doble contabilidad, algo que sería bueno que dilucidara el Ministro.