Un importante legislador republicano esbozó ayer un plan para obtener la aprobación de los tres TLC –largamente demorados– y del programa de asistencia a los trabajadores que la Casa Blanca ha insistido que el Congreso apruebe de forma conjunta.
El representante Dave Camp, quien dirige la Comisión de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes, instó al presidente Barack Obama a apoyar el plan.
Su objetivo es asegurar a los demócratas que el programa de asistencia por ajuste comercial (TAA, por su sigla en inglés) para trabajadores desplazados por el comercio internacional no sea eliminado durante la tramitación de los tratados con Corea del Sur, Colombia y Panamá.
“Creo que ahora hemos establecido un marco de trabajo razonable, que asegurará que el TAA avance y que los acuerdos sean votados”, dijo Camp, en un discurso en la Cámara de Comercio estadounidense.
Los demócratas perciben el TAA como parte vital de la red de asistencia social estadounidense, mientras que muchos republicanos, especialmente aquellos elegidos el año pasado con la promesa de recortar el gasto del Gobierno, cuestionan su efectividad y costos.
“Ciertamente ha habido conversaciones productivas con los líderes en ambas Cámaras en la senda para aprobar este paquete de comercio creador de empleos y asegurarse de que los trabajadores estadounidenses tengan la oportunidad y el entrenamiento que necesitan, pero, hasta ahora, no hay un acuerdo sobre el camino a seguir”, dijo un asesor demócrata del Senado.
Los republicanos objetaron un plan anterior de la Casa Blanca de incluir una extensión del TAA en la implementación del tratado con Corea del Sur, ya que quieren una votación separada del programa de cerca de 50 años de existencia para ayudar a los trabajadores desplazados.