Sin embargo, no todo es negativo. Hace poco, Foreign Policy , una de las revistas más influyentes del mundo en materia de política y economía internacional, publicó un artículo en el que los expertos Francis Fukuyama y Seth Colby presentaron a Medellín como un ejemplo que podría replicarse en otras ciudades que afrontan problemáticas similares.
Señalan, específicamente, que ese caso puede servir para que México enfrente su problemática de violencia derivada del narcotráfico. El texto, titulado ‘La mitad de un milagro: cómo se salvó la ciudad más violenta del mundo’, demuestra que es posible llevar a cabo un proceso de transformación social y urbana con el trabajo sistemático desde la administración pública y el compromiso ciudadano.
La experiencia positiva de la capital de Antioquia merece ser analizada dentro y fuera del país. Si bien a la ciudad aún le quedan muchos retos por enfrentar, pues lo que se vive es más un buen síntoma de mejoría que la conclusión de un proceso definitivo, el análisis de los investigadores revela que los paisas van por buen camino.
A propósito de los logros mencionados, Juan Manuel Santos dio hace poco luz verde para la construcción del Tranvía de Ayacucho y anunció la aprobación de recursos, por un monto de alrededor de 40.000 millones de pesos, para la construcción de la vía conocida como “Proyecto 4.1 kilómetros” en Antioquia.
Pareciera entonces que los medellinenses tienen fórmulas apropiadas para gestionar los avances de desarrollo desde el trabajo local y así tener el soporte del Gobierno Nacional para avanzar con pasos más firmes.
El reto para las demás ciudades del país está claro: enfrentar los problemas en materia de seguridad y de corrupción, sin perder de vista las necesidades de índole social y desarrollo urbano que hicieron de la capital de la montaña un ejemplo a seguir.
Ricardo Ávila Pinto
ricavi@portafolio.co
