La operación tuvo lugar el sábado pasado, cuando unos agentes de una unidad de intervención rápida que efectuaba una patrulla “sintieron un fuerte olor a marihuana que salía de los canales de aireación” del túnel situado cerca de la estación Roma-Casilina, agregó esta fuente.
En total, se han instalado unos “4.000 metros cuadrados de invernaderos para el cultivo y la producción de marihuana”, según el comunicado difundido por la policía financiera en su portal de Internet.
La policía incautó 340 kg de droga, unas “340.000 dosis, de entre 7 y 8 euros el gramo, por uno valor estimado de 3 millones de euros”.
Por el momento, solo se ha producido la detención de un italiano de 57 años que se presentaba como agricultor, pero la investigación prosigue en busca de probables cómplices, según el portavoz.
Al fondo del túnel, los agentes descubrieron lo que parecía un cultivo de champiñones y después un muro de ladrillos móviles que “constituyen como un doble fondo para esconder la zona donde se cultivaba la marihuana”, explicó el portavoz.
Los policías descubrieron centenares de plantas de marihuana en un invernadero dotado de poderosas lámparas halógenas y un sofisticado sistema de irrigación conectado a reservas subterráneas.
El laboratorio estaba equipado con varias máquinas para secar las plantas, balanzas de precisión y productos químicos para la preparación del cannabis.