“Si lo esencial es invisible a los ojos” como reza la famosa frase del ‘El Principito’ en la novela homónima escrita e ilustrada por el escritor y aviador francés Antoine de Saint-Exupéry, el recientemente inaugurado “Parc du Petit Prince” (“parque del príncipito, en francés”) (PdPP) es muy difícil que pase inadvertido.
Este parque temático ocupa 24 hectáreas en la región Ungersheim, cerca de Mulhouse, al este de Francia, y puede ser una experiencia inolvidable para los niños, que descubren los insólitos mundos y personajes que recorre y conoce este particular viajero procedente de un lejano ‘planetoide’ y que observa con perplejidad el mundo de los adultos.
Igualmente, muchos “no tan niños”, que en algún momento de su vida descubrieron y compartieron los simbolismos de esta obra aparentemente infantil, pero repleta de mensajes de una sabiduría vital de gran calado, difícilmente olvidarán una visita a este centro de ocio al aire libre inaugurado en julio de 2014 y situado en el antiguo parque temático Le Bioscope.
Globos aerostáticos, un tobogán-serpiente y zorros vivos son algunas de las atracciones y juegos disponibles en él, que cuenta con 31 zonas que recrean los ambientes, los temas y personajes del libro clásico publicado en 1943.
Sus organizadores esperan que este parque atraiga a unos 150.000 visitantes cada año.
Este centro de ocio aspira a ser un fiel reflejo material de la historia simbólica, filosófica y llena de observaciones profundas sobre la vida y la naturaleza humana, imaginada por el escritor-aviador francés y que, según el portavoz del PdPP, “tiene versiones en 285 idiomas, lleva vendidas 150 millones de copias en el mundo y es uno de los libros más populares, con más de 400 millones de lectores”.
El zorro -que le hace ver al Principito el sentido de la amistad y la esencia de las relaciones entre las personas y le regala la célebre frase “Solo se ve bien con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos”- es un personaje medular, no solo de esta historia, sino también del parque temático, donde pueden verse ejemplares vivos de estos animales, así como de corderos, otro de los singulares personajes que aparecen en la obra literaria.
EFE/REPORTAJES