Este martes durante el foro que realizó la Universidad del Rosario, la Fundación Konrad Adenauer y Naciones Unidas sobre la migración venezolana, el canciller de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, aseguró que en los próximos días el Gobierno estará presentando un documento Conpes que busca trazar la política pública para atender la crisis que golpea al país.
(Lea: ¿Podrá Venezuela reflotar su criptomoneda, hoy intransferible?)
Además, aseguró que de seguir el flujo migratorio registrado entre abril y agosto del 2018, "nos veremos obligados a hacer reajustes presupuestales en varios sectores del Gobierno".
(Lea: Reformas económicas de Venezuela causan incertidumbre)
El encuentro se dio en un momento de tensión entre Bogotá y Caracas, luego de que el presidente Iván Duque liderara la redacción de una carta dirigida a la Corte Penal Internacional, junto con otros cinco mandatarios, en la que le piden a la autoridad que investigue presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos por el régimen del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
El canciller, durante el evento, indicó que el país está afrontando el éxodo venezolano bajo tres niveles, uno nacional, uno regional y otro multilateral. En ese orden de ideas dijo que han realizados esfuerzos presupuestales, de salida a los países cercanos con el propósito de “armonizar esfuerzos para ordenar la crisis”, así como dijo haber tocado las puertas de la OEA, las Naciones Unidas, el Banco Interamericano de Desarrollo y los países aliados de Colombia como Estados Unidos para la consecución de recursos.
Holmes Trujillo mencionó que a la fecha el país ha recibido 936.000 venezolanos, lo que hace que esta migración, en sus palabras, sea la tercera más grande del mundo luego de las que afronta Turquía y el Líbano, y la más grande en la región latinoamericana.
El ministro de Relaciones Exteriores reveló que el país maneja tres escenarios sobre la migración: un escenario base indica que a Colombia van a llegar 2´166.000 venezolanos, un escenario optimista habla de 1´850.000 ciudadanos del vecino país, mientras que uno pesimista habla de más de cuatro millones de venezolanos que llegarán al país.
“Esta es una magnitud que no había vivido nuestro país ni nuestra región. Si se mantiene la tasa de migrantes registrada, se estima que llegaremos a las 4 millones”, afirmó.
Esto requerirá dinero adicional para educación, salud, trabajo, entre otros. Según dijo el canciller, a 2021, según los diferentes escenarios el monto de presupuesto variaría, en el escenarios base se necesitarían 12 billones de pesos, en uno optimista, 10 billones de pesos y en uno pesimista, hasta 26 billones de pesos.
Frente a esta realidad dijo: "Vamos a afinar nuestra capacidad institucional interna y vamos a realizar los reacomodos que sean necesarios sin sacrificar otras prioridades de los presupuestos nacionales".
Finalmente, el canciller dijo que el Gobierno actuará con la "convicción de que es un desafío hoy, pero si actuamos ordenada y coordinadamente en la región, estaremos construyendo las oportunidades que históricamente han representado los fenómenos migratorios", así mismo recordó que en los próximos días estarán presentando la ruta que seguirá el Gobierno Duque para el manejo de la migración venezolana.
Otras intervenciones durante el foro
La primera en intervenir en este foro fue la rectora encargada de la Universidad del Rosario, Stephanie Lavaux, quien dijo que se necesitan esfuerzos multilaterales.
"Para un país como Colombia, que se ha caracterizado por ser inmigrante pasar a ser de inmigración y de tránsito genera retos importantes para la sociedad en su conjunto. La migración reciente requiere del esfuerzo multilateral. En esta fecha el Estado colombiano está ante la posibilidad de garantizar que esta migración sea ordenada", expresó.
Por su parte, Roberto Pombo, director de EL TIEMPO, manifestó que se deben evitar "los brotes de xenofobia" en el país.
"Nos estamos preparando para enfrentar un problema de las magnitudes del proceso de paz que vivimos e incluso superior. Podemos hablar de una tragedia continental humanitaria que requiere un enorme esfuerzo de los estados", aseguró Pombo.
En esto coincidió Martín Santiago, coordinador residente de la ONU en Colombia, quien no obstante resaltó que "Colombia está dando un ejemplo de humanidad ante el mundo" por la forma en la que ha recibido a los migrantes venezolanos y pidió que el trabajo en este sentido sea a la vez de toda la región y también multilateral.
Había expectativa por conocer el pronunciamientos que en torno a la situación el embajador de Estados Unidos en Colombia, Kevin Whitaker, quien se mostró duro con el régimen de Nicolás Maduro.
Dijo que "algo está mal si los ciudadanos de un país rico, con petróleo, tienen que irse a mendigar a las calles de Colombia para alimentar a sus hijos", por lo que indicó que
Estados unidos está tomando acciones concretas "contra aquellos que en el régimen de Maduro son responsables de la destrucción venezolana, la violación de derechos humanos y que se están enriqueciendo a costa de la crisis", manifestó.
Mientras que dijo que Colombia "ha demostrado estar a la altura del desafío" y que por eso permanecerán como aliados del país en la atención a migrantes. "Estamos a su lado para responder ahora y en el futuro para afrontar las consecuencias de la dictadura de Venezuela que ha abandonado a su pueblo y a los principios democráticos", aseguró.
Además, intervino el representante de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur), Jozef Merkx, y la jefe de misión de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Ana Eugenia Durán.
Además estuvieron los embajadores de Ecuador, Rafael Paredes, y Perú, Ignacio Higueras, el director de Migración Colombia, Christian Krüger, y Felipe Muñoz, gerente de Fronteras.
El evento se realizó en el auditorio del antiguo Jockey Club.
POLÍTICA