El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) aseguró que en febrero, este fenómeno es común en las zonas como la Sabana de Bogotá, el Altiplano Cundiboyacense, y los departamentos de Caldas, Nariño y parte de Antioquia.
Los cultivos que enfrentan el mayor riesgo son papa, maíz, verduras, hortalizas, frutales de ciclo corto, pastos y flores, aunque estos últimos se protegen a través del cultivo en invernadero.
La presencia de heladas puede afectar la producción y, de esa manera, causar grandes pérdidas entre los cultivadores, al tiempo que genera presiones inflacionarias por la reducción de la oferta de alimentos en el mercado. Igualmente, los consumidores, además de verse afectados porque tienen que pagar precios más altos por los alimentos, también empiezan a recibir productores de menor calidad., afectados por el efecto de las heladas.
El Ministerio de Agricultura les recomendó a los campesinos tener en cuenta las recomendaciones sobre prevención de los efectos de las heladas y la aplicación de prácticas agropecuarias adecuadas para contrarrestar este fenómeno.
RIESGO DE EL NIÑO
De la misma manera, el Ministerio de Agricultura alertó sobre el riesgo del fenómeno de El Niño, generado por la variación climática que se desarrolla en el océano Pacífico tropical e influye en el clima del país, asociado con una disminución de las lluvias en relación con el promedio histórico mensual y aumento de las temperaturas del aire, especialmente en las regiones Caribe y Andina.
Este fenómeno repercute negativamente en el sector agropecuario: variaciones en el rendimiento de algunos cultivos, disminución del caudal de los ríos, incremento en el riesgo de incendios forestales y posibles racionamientos de agua, tanto para riego, consumo animal y humano.