Roger Waters es el ex Pink Floyd, creador de The Wall. El verano de este año que termina paseó triunfal por Europa su monumental montaje escénico que se mostró ante públicos masivos de15.000 personas en adelante. Waters no es un caduco y jurásico artista del circuito de la nostalgia. Es un artista vivo, vibrante, actual que dentro de la frialdad de su espectáculo muestra la excelencia musical que hizo famoso al grupo Pink Floyd durante los años 70, con una banda espectacular y un montaje extraordinario, estará el 9 de marzo en Bogotá. The Cure es el grupo post-punk de finales de años 70, que gira en torno a la personalidad y el talento de Robert Smith, guitarrista, compositor y cantante. Han sido encasillados en el llamado rock gótico pero su música va mucho más allá de esos nichos en los que nos gusta tanto meter a los artistas como veremos en abril. The Deftones según el anuncio oficial se presentan en Bogotá Columbia en el Palacio des Deportes el 6 de febrero de 2007. Esta agrupación de rock metal alternativo californiano es considerada una de las más innovativas e importantes del mundo. El grupo liderado por el Chino Wong Moreno hace más de una década que anda por ahí con éxito. Pet Shop Boys se presentaron hace doce o trece años en el Estadio El Campín en Bogotá, de pronto con menos gente de la esperada, dicen que fuimos unos 15.000. El dúo que durante los noventa tuvieron éxitos como Go West, West End Girls, Always On My MInd y It's A Sin, ofrecerá con seguridad al lado de sus canciones nuevas de Release y Fundamental, los clásicos que hace tanto tiempo conocemos. Y dentro de los que dicen pueden venir está el hoy veterano trompetista de jazz, Chuck Mangione. Podría ser para septiembre. La mayoría de los eventos anunciados, están programados para el Parque Simón Bolívar. Es un escenario amplio, con buenas facilidades de estacionamiento, sin restricciones de hora límite por tutelas, bueno, hasta ahora. Lo que sí hay que pedir es que se adecúe el espacio. Deben crear la infraestructura como para permitir el goce de un concierto con cierta comodidad. En los últimos conciertos allí organizados ha sido una faena más digna de un safari que un show musical. Ojalá piensen en localidades con sillas para que quienes asistan y pagan una boleta nada barata, tengan unas mínimas condiciones que le hagan juego al tamaño e importancia de los conciertos. O sea, hagan las reservas presupuestales que el año 2007 en este asunto de conciertos pinta. Periodista "Son tan buenas las noticias que llegan de conciertos para el 2007, que sólo podemos celebrarlo.
