Colombia es uno de los países que más utiliza el efectivo como medio de pago en América Latina y uno de los cuales tiene la menor tasa de bancarización.
En ese sentido, las firmas que ofrecen tarjetas deberán hacer grandes inversiones y "tener mucha paciencia" para desarrollar el potencial de este mercado.
Así se desprende de un informe de la firma Euromonitor, según el cual a la baja penetración de este tipo de servicios se suma un sector financiero fuerte y una economía con un desempeño relativamente bueno, lo cual "para las franquicias de tarjetas que operan en el país, es signo de enorme potencial", dice.
Sin embargo, la tarea tiene que empezar por las tarjetas débito. Este tipo de plástico es más popular que las de crédito, pero en Colombia es muy bajo el número per cápita. La ventaja es que la población de bajos recursos por lo general tiene alto riesgo de crédito y, por ello, es más fácil atraer usuarios de débito.
Justamente, MasterCard y Visa han anunciado que continuarán enfocadas en el negocio de tarjetas débito en la región. José María Ayuso, director regional de productos de Visa para América Latina, explicó que por la crisis financiera, se ha reducido el uso de las tarjetas de crédito y aumentado el de débito.
"En nuestro caso crecemos en ambos frentes, pero en crédito el aumento es mucho menor al esperado, así que estamos volcados en débito".
Euromonitor señala que si bien hay obstáculos como la mala imagen de los bancos, el cuatro por mil y el enfriamiento de la economía, en el largo plazo se fortalecerá el crecimiento del mercado de tarjetas.
Productos más atractivos
Para que crezca el mercado de tarjetas se necesita que las compañías y las autoridades se concentren en reducir costos e intereses para hacer sus productos más atractivos, aunque se espera que esto ocurra a medida que evolucione la tecnología, según el informe de Euromonitor.