Después de dos años de haber iniciado en firme el proceso para obtener la licencia ambiental para iniciar la construcción del proyecto hidroeléctrico Porvenir II, la empresa Celsia, principal accionista del proyecto, obtuvo el pasado viernes la tan anhelada noticia.
La empresa recibió la resolución con la cual la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Anla, autorizó la realización del proyecto que pretende sumar una capacidad de 352 megavatios de generación, y requiere una inversión aproximada de 864 millones de dólares.
Ahora, la tardanza en la resolución de este trámite causó grandes retrasos en el proyecto, que debía entrar en operación en el 2018 y ahora, en el mejor de los casos, estará listo en el 2020.
Para el presidente de Celsia, Juan Guillermo Londoño, si bien es cierto que la demora del trámite ha retrasado el inicio de las obras, el que finalmente se haya dado una respuesta a la solicitud es una buena señal.
“Somos respetuosos de los procesos, y en todo caso hay que destacar el esfuerzo que se ha venido haciendo en favor de resolver las solicitudes que presentamos para el desarrollo del país, según considere la autoridad”, señaló.
Voceros gremiales de los sectores petroleros y de infraestructura coinciden en que en los últimos meses se ha logrado descongestionar buena parte de los procesos.
A noviembre del año pasado la Anla llevaba resueltas 93 solicitudes que estaban represadas en la autoridad, de infraestructura, minería y petróleo, de las cuales 83 fueron resueltas y a las 8 restantes les requirieron información adicional.
De acuerdo con el ministro de Ambiente, Gabriel Vallejo, el avance se ha logrado sin afectar la rigurosidad técnica del proceso y este año, que entra en vigencia el decreto 2041 del 2014, con el cual se cambia el mecanismo para la expedición de licencias ambientales, se podrá avanzar más rápido.
“El proceso nuevo empezó el primero de enero, eso es como cuando usted cambia de gerente en una empresa, que sin hacer grandes cambios estructurales obtiene resultados. ¿Cómo se ha hecho la descongestión?: dialogando con la gente, yendo al territorio, en unos casos hemos tenido que negar solicitudes”, señaló Vallejo.
El camino que falta
En la Anla aún no hay indicadores de cómo ha funcionado el nuevo mecanismo, sin embargo, de acuerdo con el director jurídico de la Cámara Colombiana de Infraestructura, Juan Carlos Quintero, aún es pronto para evaluar este nuevo mecanismo.
“Los proyectos de cuarta generación que están en las primeras fases, que incluyen las licencias, utilizarán este nuevo mecanismo que, en teoría, debe ser más ágil, porque hay un solo momento para que la autoridad haga devoluciones. Pero hasta ahora se están haciendo los diagnósticos”, señaló Quintero.
Por su parte el presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo, Francisco Lloreda, sostuvo que en este sector se ha visto ya un avance y se han descongestionado procesos.
“En los últimos tres meses hemos visto mayor celeridad, algo que apreciamos y valoramos los empresarios, sin embargo, el tiempo promedio sigue siendo de 15 meses por cada licencia y ahí hay todavía mucho por hacer”, señaló el dirigente gremial.
Agregó que en este momento analizan con los ministerios de Ambiente y de Minas y Energía algunas restricciones con las que se están emitiendo licencias para la actividad petrolera.
El Ministro de Ambiente sostiene que lo más importante del caso es que se han mejorado los canales de comunicación y han aumentando las salidas a campo para que la Autoridad pueda tomar decisiones basadas en un conocimiento real del terreno y de los proyectos.
CELSIA MANTIENE EL INTERÉS EN PORVENIR II: JUAN G. LONDOÑO
El equipo técnico de Celsia está concentrado en analizar el contenido de la resolución que les dio la licencia ambiental para construir el proyecto de Porvenir II.
Y es que, después de la publicación de la resolución, el Ministerio de Ambiente da un tiempo para que se presenten opiniones con respecto a lo contemplado en la licencia. Tras ese plazo, si no hay objeciones la autorización queda firme.
A pesar de que la empresa aún no ha terminado de estudiar las condiciones interpuestas en la licencia ambiental, para la construcción del proyecto, el presidente de la empresa, Juan Guillermo Londoño, señaló que el interés en el desarrollo del proyecto se mantiene.
“La compañía sigue creyendo en el proyecto, creemos que es competitivo e interesante”, señaló el ejecutivo.
En cuanto quede en firme la licencia la firma debe iniciar el proceso de gestión predial y, posteriormente, la fase de construcción.