Entre los 25 principales destinos europeos analizados en el informe figuran también las ciudades españolas de Sevilla (sur), Granada (sur) y Valencia (este), que registran descensos del 13 por ciento, el 24 por ciento y el 28 por ciento en tasa interanual, respectivamente, mientras que la caída media europea es del 10 por ciento.
Así, una habitación doble cuesta de media 87 euros (unos 120 dólares) en Madrid, mientras que durante todo el año nunca había bajado de los 100 euros (unos 140 dólares), mientras que Barcelona pasa de los 119 euros (unos 165 dólares) en junio pasado a los 110 euros (unos 150 dólares) en julio.
En cuanto a Europa, Estocolmo es el caso más significativo al registrar una caída de precios de un 27 por ciento con respecto a junio y de un 20 por ciento en tasa interanual.
En Roma, la caída interanual es de un 14 por ciento, de 138 euros (unos 190 dólares) a 119 euros (unos 165 dólares), mientras que en Bruselas los precios descienden un 24 por ciento, de 133 a 101 euros (de 185 a 140 dólares).
Y es que los viajeros se resisten a reservar sus vacaciones con antelación y los hoteleros se ven obligados a atraer a compradores a base de reducir sus precios y perder margen de beneficio.
Hay excepciones como Navarra, que esta semana celebra los Sanfermines, donde el precio medio de una habitación doble es de 168 euros por noche (67 euros más que en junio).
Este datos contrasta con las tarifas de capitales como Madrid, con 87 euros de promedio por habitación doble (en los seis primeros meses no ha bajado de 100 euros) o Sevilla con una tarifa promedio de 77 euros por dia.
En Europa, la ciudad más cara es Ginebra, con un promedio de 216 euros por noche, seguida de Estocolmo (162 euros) y París (156 euros). Copenhague, con 158 euros, y Londres, con 152 euros, no se quedan atras.
El portal Trivago asegura que las tarifas de los alojamientos cayó 10 por ciento en Europa.
Y en España algunas ciudades presentan unos precios hasta 20 por ciento menores que hace un año.